La Fundación Zile expresó su profunda preocupación por el impacto de las recientes deportaciones masivas desde los Estados Unidos hacia Haití y la República Dominicana (RD).
Al considerar el caso particular de esta isla compartida por dos países con una relación delicada, la Fundación exhorta a la administración estadounidense a reconsiderar las políticas de repatriación y a promover un enfoque trilateral mediante el diálogo entre los Estados Unidos, Haití y Dominicana.
“Llama la atención que, en el marco de su visita a la región, el Secretario de Estado Marco Rubio no haya considerado oportuno visitar Haití. Esto es especialmente relevante en un momento en el que el gobierno estadounidense ha congelado los fondos destinados a la misión internacional de seguridad liderada por Kenia, ha cerrado programas de ayuda de USAID y, coincidentemente, con la llegada de soldados salvadoreños al país”, manifestó.
Señaló que desde octubre del año pasado, Haití ha estado recibiendo semanalmente más de 10,000 repatriados desde RD y que las recientes medidas adoptadas por el gobierno estadounidense para intensificar las deportaciones ponen en riesgo la estabilidad social y económica de ambos países que comparten la isla.
Refirió que la situación en Haití es crítica, con una crisis humanitaria agravada por la acción de bandas armadas que controlan algunos sectores del territorio.
Exhorta a Estados Unidos a usar su liderazgo para promover soluciones sostenibles que reduzcan los flujos migratorios hacia su territorio, mientras adopta medidas contundentes para combatir desde sus costas el tráfico de armas y municiones que afecta la estabilidad insular, al referir que situación en Haití requiere, además de los esfuerzos y compromiso de los dirigentes locales, , de una acción inmediata y coordinada, de los países vecinos y la comunidad internacional.