Santo Domingo.- Los pequeños, medianos y grandes productores y exportadores de piña, realizaron un llamado urgente a las autoridades ante la llegada de un contenedor, procedente de Costa Rica, con el producto que ellos comercializan, y su posible distribución sin contar con los permisos establecidas por las autoridades sanitarias en el territorio dominicano.
Mediante una carta -entregada- dirigida al ministro de agricultura, fechada el miércoles 04 de octubre 2023, los voceros indicaron que la situación actual llevará a la quiebra a todo el sector piñero, dejando a más de 1,000 familias sin sustento.
Según consta en el documento, el miércoles 20 de septiembre, fue recibido en el puerto multimodal Caucedo, el contenedor HLBU954686-7, con el No. TRM-0923-1093526, cuyo contenido era una importación de piña, origen Costa Rica, importado por la empresa GL. SILA SRL. El mismo llegó al puerto sin contar con la guía de no Objeción Fitosanitaria del departamento de Sanidad Vegetal.
Es por este motivo que en fecha 26 septiembre 2023, la encargada oficial de sanidad vegetal del puerto multimodal Caucedo, la ingeniera Vilma Tiburcio, le solicitó una auditoría ha dicho contenedor al licenciado Miguel Antonio Ortega H., administrador de aduana en Caucedo.
Lo antes expuesto resulta de gran preocupación para los productores, ya que presenta un riesgo fitosanitario para todos los sectores de la producción nacional, pues el origen de dicho producto viene de un país afectado por la mosca del establo que afecta al ganado y seres humanos.
Algunos de los parásitos y enfermedades notificados de los cuales la mosca de los establos puede ser un vector son: trypanosoma evansi, trypanosoma brucei, brucelosis, anemia infecciosa equina, la peste equina africana (AHS), la viruela aviar, stomoxys calcitrans que también es un vector de bacillus anthracis, el agente causal del ántrax.
Costa Rica también tiene en su hábitat la plaga de la hormiga loca, capaz de afectar cultivos por la simbiosis con otros organismos, así como atacar animales domésticos y silvestres. De ahí el llamado realizado por los productores al gobierno advirtiendo que, de no reaccionar ante la situación, se podrían perder más de $1,000 millones de pesos dominicanos de inversión, lo que implicaría la quiebra del sector y el paro en la producción, dejando centenares de familias sin sustento e imposibilidad de abastecimiento de la demanda nacional e internacional.
Con la posible distribución del contenedor de piña llegado a puerto Caucedo la economía nacional se ve en el riesgo ante la probable introducción de enfermedades fitosanitarias, ajenas a la realidad socio-ambiental de nuestro país, pudiendo esto traer fuertes consecuencia a la producción y exportación de nuestros productos agrícolas.
De ahí la urgencia de frenar esta adquisición como una manera de salvaguardar la sanidad alimenticia de nuestra nación.