Familiares, amigos, miembros de distintos partidos, entre ellos el Reformista Social Cristiano (PRSC) y otras personalidades del país, despidieron ayer a Rafael Bello Andino, quien fuera el colaborador y hombre más cercano al expresidente Joaquín Balaguer, con quien trabajó desde el 1956.
Bello Andino falleció el pasado miércoles y sus restos fueron expuestos ayer en la funeraria del cementerio Jardín Memorial de la avenida Jacobo Majluta de esta capital, donde luego fue sepultado, rodeado de sus parientes y amigos cercanos.
Como uno de los más pulcros funcionarios de su época fue definido por los que fueron sus compañeros en el PRSC, además de considerarlo como un hombre discreto y leal. Así lo expresó Federico (Quique) Antún Batlle, actual presidente del PRSC; Máximo Castro Silverio; Fernando Álvarez Bogaert y Alexandra Izquierdo, también dirigentes del PRSC.
Lo recuerdan así…
“Un hombre discreto, prudente, leal, con todas las cualidades de su familia, de bajo perfil, nunca le hizo daño a nadie. Hemos perdido un ejemplo de servidor público como hoy no existen. Yo entré muy jovencito (a la política), él entró muy joven también, en la era de Trujillo, era amigo de mi papá, y cada vez que yo tenía algún tipo de rebeldía o de situación de inconformidad o las ingratitudes por las situaciones que surgen en la política él de alguna manera u otra me orientaba”, expresó Antún Batlle al conversar con la prensa en las afueras de la funeraria.
“Una de las figuras que yo más admiro de los doce años de Balaguer fue Rafelito. Él era una armonizadora y nunca intervino en cualquier pleito, más bien para que se evitara. Yo tengo de él esos recuerdos. Aquí nadie sabe, quizás más que yo de Rafelito”, manifestó Fernando Álvarez Bogaert.