Contra todo pronóstico, las siamesas que comparten el tracto gastrointestinal, el hígado, el aparato genitourinario y la parte músculo-esquelética del tórax hacia abajo, arribaron hoy a su primer mes de vida de manera satisfactoria por lo que fueron dadas de alta de la Maternidad La Altagracia.
Tras superar una primera semana con serias complicaciones a nivel renal y del hígado, así como dificultad respiratoria severa que amenazaba con sus vidas, al día de hoy Melanie y Abigail pueden ingerir hasta tres onzas de leche materna cada una y responden a los estímulos, según explicó la cirujana pediátrica Cristina Paulino, quien encabeza junto a la gerente del departamento de Perinatología, Yolanda Grullón, gerente del departamento de Perinatología y la ginecóloga obstetra, Franca Valoy, el equipo multidisciplinario que asistió a la madre Yudis Alcántara.
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Paulino explicó que el caso de las siamesas tipo toracópago, ha despertado el interés científico de los hospitales estadounidenses Cincinati Children Hospital, Presbiteriano de Nueva York y el Pediátrico de California por el hecho de haber sobrevivido, ya que usualmente desencadenan en un aborto espontáneo o no sobrepasan la semana de vida.
“Estamos hablando de uno en 200 mil casos que vemos y muchas veces se diagnostican y no se ve la viabilidad, es decir, no sobreviven”, dijo.
En tal sentido, la especialista explicó que han seguido todas las recomendaciones de los tres hospitales que han requerido que las hermanitas que no tienen ano y que defecan mediante una fístula, sean dejadas lo más intactas posibles a fin de que ganen peso y talla para en el futuro evaluar la posibilidad de una posible cirugía de separación.
“Si se decide hacer un procedimiento quirúrgico es por encima de los nueve meses y la parte principal que están estudiando el caso con un consejo ético, es algo que no es deliberado, no podemos dar respuesta de que se va a hacer después”, dijo Paulino.