El doctor Pedro Luis Castellanos, Superintendente de Salud y Riesgos Laborales, dijo ayer que ha llegado el momento de que el país asuma con responsabilidad la reforma de la Ley 87-01, de Seguridad Social.
“El centro de estos procesos debe ser fortalecer los derechos y la protección social del derecho a la salud de los ciudadanos.
Necesitamos construir un clima que permita valorar con serenidad las diversas ideas y propuestas, desde la perspectiva de los intereses de los afiliados y de establecer justos balances entre los intereses particulares que los afectan”, sostuvo el funcionario.
Dijo que para avanzar en la reforma de la Ley es necesario que los sectores gremiales, empresariales, aseguradores y organizaciones sociales identifiquen sus propuestas para construir los consensos necesarios que ayuden a aprobar la modificación en el Congreso.
Explicó que no debe confundirse el Seguro Familiar de Salud con el ejercicio privado liberal de las profesiones ni tampoco con seguros de índole privada lucrativa.
“El Seguro Familiar de Salud es una política pública social, establecida obligatoriamente por Ley y cuyo principal propósito no es el lucro o los márgenes de beneficio económico de ningún sector de nuestra sociedad, sino la protección social del derecho a la salud de toda la ciudadanía”, sostuvo.
Indicó que los mayores desafíos tienen que ver con la mejora de la cobertura y elevar la calidad y resultados de los servicios, reducir su gasto familiar y copagos, garantizar la Atención Primaria, incorporar un enfoque más preventivo y de promoción de la vida saludable, garantizar mejor acceso a los medicamentos esenciales y una mejor forma de gestión de las coberturas de alto costo, además de fortalecer las regulaciones de las ARS y de los Prestadores de Servicios de Salud para proteger mejor a la ciudadanía ante abusos y manipulaciones.