Las agresiones del dirigente comunitario José (Guanchy) Comprés han vuelto a exponer los excesos de autoridad cometidos por agentes de la Policía Nacional en el ejercicio de sus funciones.En el caso de Comprés, este denunció que los agentes de la dotación policial de Moca, liderados por el coronel Nelson Valenzuela, no solo lo golpearon sino que le colocaron droga para acusarlo de tráfico de drogas.
Sin embargo, esa no es la única acusación en contra del coronel Valenzuela. Según indican recortes de prensa, en el año 2009 Valenzuela estaba comandando la dotación policial de San Cristóbal y los residentes en esa ciudad, en varias ocasiones, pidieron su destitución por la supuesta práctica de éste de cobrar “peaje” en los puntos de drogas y colocar narcóticos a jóvenes en redadas.
La agresión a Comprés ocurrió a menos de un mes de que suspendieran al comandante del destacamento de La 40, en Cristo Rey, Distrito Nacional, el general Leopoldo Mariñez, quien fue destituido por una golpiza a una joven de 17 años.
Ese hecho se produjo a mediados del mes pasado, en el sector El Caliche de Cristo Rey, cuando una patrulla de policía intentó apresar a un hombre por supuestamente escuchar música a alto volumen y cuando su hija intentó impedirlo, la golpearon y la halaron por el pelo.
Por dicha acción fue suspendido tanto el general Mariñez y otros agentes subalternos de ese destacamento.
Mientras que en marzo de este año suspendieron al segundo teniente José Manuel Peña Familia, adscrito a la cárcel preventiva del Palacio de Justicia de Puerto Plata, después que quedara grabado en video cuando golpeó a una mujer que se resistió a un arresto en el interior del edificio.
Al ser preguntado sobre esos excesos, el vocero de la Policía, Nelson Rosario, informó que esa institución no permitirá conductas que vulneren los derechos de los ciudadanos.