El Centro de Atención Integral a la Primera Infancia (CAIPI), reanudó ayer los servicios luego de casi dos semanas sin laborar a causa de la explosión en PolyPlas el pasado 5 de diciembre, donde están inscritos 314 niños.
La institución que está ubicada en Villas Agrícolas, próximo donde ocurrió el siniestro no fue tan afectada por la onda expansiva que destruyó decenas de casas y negocios en la zona. También aseguraron que al momento de la explosión lograron evacuar a todos los infantes y ninguno resultó herido.
De los 314 menores que reciben atención primaria solo asistieron ayer 96, influenciados por ser ésta la última semana de labores de la institución hasta que comiencen nuevamente en enero, otros han sido enviados a diferentes puntos del interior del país por sus padres con motivo de la navidad. La institución informó que trabaja en el proceso de soporte psicológico con los pequeños, así como actividades donde estos puedan exteriorizar cualquier tipo de miedo o fobia que tenga posterior al estallido.
“Tenemos un equipo de la sede principal en el cual ellos iniciaron un plan de intervención psicológica con el personal, es decir, con los colaboradores y los niños. Fue un proceso bien difícil donde nos encontrábamos tantos colaboradores como niños y lo importante es que ninguno salió herido y pudimos evacuarlos a tiempo”, dijo Mónica Fernández, encargada del centro de atención en Villas Agrícolas. Asimismo, indicó que el día del suceso había muchos infantes llorando de manera desesperada, que tuvieron además que pedir ayuda a vecinos del sector para ayudarlos a sacar porque algunos aún no caminan y otros se quedaron inmóviles. La entidad de atención primaria recibe bebés desde 45 días de nacidos hasta los cinco años de edad cuando pasan a las aulas en las escuelas, igualmente 50 colaboradores velan por el cuidado de estos.
Reparaciones continúan a todo vapor
En tanto que PolyPlas continúan los trabajos de remozamiento de escombros y reparación de las viviendas afectadas por el estallido. Esperan que antes del 31 de diciembre culminen con las reparaciones de las casas. Asimismo, el proceso de construcción de las viviendas desde cero que fueron demolidas por representar un peligro para sus propietarios.