La Planta de Tratamiento que construye la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD) será fundamental para la economía del país, según informó el director ejecutivo de la Mancomunidad del Gran Santo Domingo, Onofre Rojas.
Rojas y una delegación de estudiantes de término de la carrera de ingeniería de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), visitaron ayer la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales Mirador Norte-La Zurza que construye el Gobierno a través de la CAASD.
Durante el recorrido, el director general de la CAASD, arquitecto Alejandro Montás, mostró los avances de la obra y los beneficios que tendrá para la calidad de vida de la población del Distrito Nacional y esta provincia.
“Los comunitarios, estudiantes, industriales y población general pueden venir a ver el esfuerzo que hace el Gobierno de depurar las aguas residuales de 450 mil personas”, señaló Montás, al guiar la visita por la planta.
De su lado, Onofre Rojas, dijo que no hay un proyecto que impacte más la salud pública que éste. Esto será fundamental para la economía y el proyecto impactará a los ríos Ozama e Isabela, que son dos componentes esenciales para el relanzamiento de la ciudad de Santo Domingo como destino turístico.
Visita
Con la visita, los estudiantes recorrieron las instalaciones y recibieron informaciones sobre el funcionamiento de la planta. Calificaron la instalación como una solución a los problemas de alcantarillado sanitario que sufre el Gran Santo Domingo.
Juan Faxas, uno de los estudiantes, declaró que “quedé impresionado con la obra y los avances, había leído sobre la misma, pero cuando la vi, quedé impresionado por la magnitud de ésta”.
La primera etapa de la obra ya está lista
El director de la CAASD precisó que la planta de tratamiento cuenta con una inversión total de US$110 millones y que la primera etapa, que ya está lista, entraría en operaciones en el primer semestre del año 2019. Esta planta forma parte del Gran Plan Maestro de Alcantarillado Sanitario para la provincia, que contempla una inversión a 40 años por US$612 millones.