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Santo Domingo.-Altos cargos dominicanos visitaron este sábado una zona cercana a varios puntos turísticos como Punta Cana, en el este de República Dominicana, para confirmar que no se han producido nuevos asentamientos de haitianos indocumentados.
La ministra de Interior y Policía, Faride Raful, y su homólogo de Defensa, Carlos Férnandez Onofre, encabezaron un recorrido de inspección en la comunidad de Mata Mosquito, en la provincia de La Altagracia, donde se produjeron los arrestos y la destrucción de las viviendas, de acuerdo a las autoridades.
Estas acciones forman parte de una estrategia nacional orientada a preservar el orden territorial, proteger áreas vulnerables frente a nuevas ocupaciones ilegales y garantizar el cumplimiento de los protocolos internacionales de derechos humanos en los procesos de control migratorio, destacó el Ministerio de Interior y Policía en un comunicado.
La visita también participaron los más altos cargos de la Policía Nacional y de la Dirección General de Migración.
El miércoles, AI pidió al Gobierno de la República Dominicana poner fin “de inmediato” a las expulsiones colectivas de haitianos y derogar el protocolo que vincula el acceso a servicios de salud con la deportación.
El Gobierno dominicano respondió legitimando su derecho a disponer de las medidas migratorias que considere pertinentes.
El propio presidente dominicano, Luis Abinader, respondió a Amnistía Internacional indicándole que “vaya a trabajar en Haití, que vaya a ocuparse de la situación de los derechos humanos en Haití. Que no abandonen a Haití y a la comunidad internacional también que lo haga. Nosotros, y mi responsabilidad, es defender a la República Dominicana”.
El jueves pasado, el secretario general de la ONU, António Guterres, criticó la implantación del protocolo de verificación migratoria en los hospitales de la República Dominicana, algo que solo en un día ha derivado en la detención de 87 pacientes haitianas embarazadas y próximas a dar a luz.
El Consejo Presidencial de Transición (CPT) de Haití también emitió críticas el jueves a las repatriaciones al condenar “con la mayor firmeza toda forma de discriminación y toda violación de los derechos fundamentales” de que serían víctimas los haitianos que residen en la República Dominicana.
La Cancillería de República Dominicana respondió ese mismo jueves que las repatriaciones de ciudadanos haitianos en situación migratoria irregular se llevan a cabo en el marco de la ley, y corresponden a la responsabilidad “irrenunciable” del Estado dominicano de preservar el orden público, la estabilidad nacional y la seguridad de sus ciudadanos.
Mata Mosquito es un sector muy cercano al área turística de Bávaro, donde sectores nacionalistas señalaban que era una especie de “pequeño Haití” y exigían de las autoridades la intervención en el lugar para deportar a los haitianos.