La quinta rendición de cuentas del presidente Luis Abinader fue ceremonia de tres horas y diecinueve minutos
Entre aplausos efusivos en momentos claves, manifestaciones de apoyo de ciudadanos y grupos patrióticos y bajo la formalidad que requiere la fecha, se desarrolló ayer la ceremonia de rendición de cuentas del presidente Luis Abinader, quien realizó su quinta intervención de este mandato constitucional como jefe de Estado, pero que a la vez, fue la primera de su segunda gestión de gobierno que inició el pasado 16 de agosto.
Fue una ceremonia tres horas y diecinueve minutos, que inició con la llegada del presidente Luis Abinader y la primera dama Raquel Arbaje a las 10:04 de la mañana al Congreso Nacional, lugar donde el mandatario disertó para la nación ante la reunión conjunta de las cámaras legislativas y que concluyó a las 1:15 cuando se retiró de la sede del Poder Legislativo.
Momentos y detalles fueron claves en la convocatoria constitucional que marcaron y adornaron el protocolar acto, que coincide con el 181 aniversario de la Independencia Nacional.
Como cada año, y nunca se hacen extrañar, en los alrededores del Congreso Nacional, especialmente las aceras de la Winston Churchill, estuvieron presentes los ciudadanos que muestran su apoyo a las ejecutorias del Gobierno con carteles que expresaban su aceptación. Por otro lado, estaban los grupos patrióticos que con banderas en mano y otros símbolos, celebraban la dominicanidad y la libertad de esta nación.
La ceremonia formal de rendición de cuentas inició a las 10:04 de la mañana con la llegada de Abinader al Congreso, donde fue recibido con los honores militares correspondientes, con el lanzamiento de las 21 salvas y la entonación del Himno Nacional. Allí Fue recibido por los presidentes del Senado y de la Cámara de Diputados, Ricardo de los Santos y Alfredo Pacheco, respectivamente, además de una comisión de legisladores, para luego ofrecer su quinto discurso que arrancó a las 10:30 de la mañana y concluyó a las 12:56 de la tarde, se extendió por más de dos horas, debido a que este contaba con 69 páginas.
Elementos como los besos espontáneos que, en varias ocasiones, lanzó al presidente de la República la primera dama Raquel Arbaje mientras este disertaba, como aquellos aplausos efusivos que resonaron en el Salón de la Asamblea, se destacaron en esas dos horas y media, en las que incluso, nunca se vio al mandatario tomar agua de la copa que tenía sobre la mesa.
Los temas del aumento del salario mínimo del sector privado no sectorizado en un 20 % que se logró el pasado miércoles en el seno del Consejo Nacional de Salarios; el anuncio de la paralizar la explotación minera la Cueva de Pomier, así como la información de que se declaran como terroristas en este territorio a las bandas criminales haitianas que azotan y aterrorizan en el vecino país, fueron los momentos que concitaron los aplausos más fuertes para Abinader de parte de todos los presentes en el salón y que se prolongaron por varios segundos.
Entre todos, destacaron aquellos invitados por el gobernante cuando éste tocó temas que les vinculaban. Tal es el caso de los productores de arroz que estuvieron allí cuando el mandatario hablaba sobre la protección de la producción nacional; los estudiantes y egresados del programa 14-24 que hicieron acto de presencia y los ciudadanos titulados que han recibido certificados de propiedad del Gobierno durante sus gestiones.
Los políticos con aspiraciones
En el acto de rendición de cuentas, que es meramente de Gobierno, ocurrió algo inusual, porque estuvo presente la política cuando funcionarios que tienen aspiraciones de cara al 2028, recibieron el apoyo de legisladores activos.
Así ocurrió con la alcaldesa del Distrito Nacional, Carolina Mejía, quien a su vez es la secretaria general del Partido Revolucionario Moderno (PRM). A su llegada al Congreso Nacional, mientras subía las escaleras que conducían al Salón de la Asamblea Nacional, recibió el respaldo de diputados que le seguían los pasos.
Lo mismo replicó luego, pero cuando salía de la sede del Poder Legislativo, Eduardo Sanz Lovatón, quien es director general de Aduanas, también miembro de la dirección ejecutiva del PRM y aspirante presidencial; David Collado, que es ministro de Turismo y miembro del PRM; y con Wellington Arnaud, director del Instituto Nacional de Agua Potable (Inapa) y quien también se perfila como aspirante para la contienda de 2028. Ellos midieron sus fuerzas con sus tropas y los legisladores definieron a quienes apoyan.
Aunque no fue sorprendente, hubo mucha seguridad dentro y alrededor del Congreso Nacional, incluso en todos los edificios de la zona. El discursó acabó a las 12:56, pero no fue hasta la 1:15 cuando el jefe de Estado salió del lugar para dirigirse a la Catedral Primada de América para el tradicional Te Deum.
Tiempo
Duración El discurso de rendición de cuentas, de 69 páginas, tuvo duración de dos horas y media.
Activismo
Política Aunque es inusual, en el acto de rendición de cuentas estuvo presente el activismo político de funcionarios.
