El aumento consecutivo que se registra en el precio de los combustibles provocó ayer el reclamo de la Federación de Transporte de Taxis Estacionario (Fenataes), quienes mostraron rechazo a las constantes alzas.
El vocero de Fenataes, Antonio Pérez Paulino, calificó de insólito e inoportuno que en medio de un estado de emergencia y con la presencia de la COVID-19 en el país se fijen incrementos al costo del carburante.
Dijo también que es injustificable que en momentos cuando el barril de petróleo registra un descenso significativo en su precio, en el país todavía se estén produciendo incrementos.
“Entendemos que no se justifica estos constantes aumentos en los precios de los combustibles debido a la caída de los precios del barril de petróleo cuyo precio en dólar está entre un 36 y 38 a la compra a nivel internacional”, indicó.
El sindicalista, aseguró que el sector que representa está al borde de la quiebra, ya que no existe una regulación que los ampare. Y que además tienen que sobrevivir con lo que ganan día a día y costear los altos gastos operativos y mantenimiento de las unidades, también lidiar con los precios elevados de los repuestos, neumáticos, lubricantes y otros artículos. “Es por ello, que rechazamos los constantes aumentos en los precios de los combustibles que viene haciendo el Ministerio de Industria y Comercio durante los últimas siete semanas”.
Indicó que desde hace mucho tiempo el Estado está violando la política de los combustibles, ya que, cuando el petróleo baja de precio a nivel internacional, tiene que bajar su costo aquí en el país, pero no lo hacen. Por el contrario, lo que hacen es que congelan los precios por varias semanas para después justificar su incremento