Santo Domingo. La Alianza Cristiana Dominicana (ACD), organización que agrupa a personas Católicas, Bautistas, Episcopales, Evangélicas, Metodistas y Pentecostales, salió al frente a las declaraciones del Arzobispo de Santo Domingo, Monseñor Francisco Ozoria, recordándole que la mayoría de los católicos aprueba la despenalización de la interrupción del embarazo en las tres causales.
La ACD citó los resultados de la Encuesta Nacional sobre Aborto, que arrojaron que el 79% de las y los católicos consultados estuvo de acuerdo con la causal vida o salud, el 76% con la causal inviabilidad y 66% con la causal violación o incesto, al igual que la gran mayoría de personas religiosas en el país estuvo de acuerdo con la despenalización de la interrupción del embarazo en las tres causales: cuando peligra la vida de la mujer, cuando médicamente está comprobado que el feto es incompatible con la vida y cuando el embarazo es producto de violación o incesto.
De acuerdo a una reseña en los medios, Ozoria dijo que “nadie que esté a favor del aborto puede considerarse católico”, por lo que la Alianza Cristiana Dominicana afirma que hay grupos y jerarcas de las iglesias que se proclaman defensores de la vida y que tienden a despreciar las vidas de las mujeres y solo les importa la vida del embrión y del feto. Aclararon que el fundamento evangélico es que las mujeres son criaturas de Dios y merecen vivir con dignidad y plena salud.
Explicaron que “las violaciones e incestos ocurren bajo condiciones deshumanizantes para la mujer y, por tanto, son contrarias al propósito de Dios de que todas las personas tengan vida, y vida en abundancia como recoge el evangelio de San Juan en su capítulo 10. Sin dudas, las mujeres están incluidas en esa aspiración de Jesús de Nazaret”.
“La vida y la dignidad es uno de los principios cristianos capitales. Como dice Juan 10,10: “El ladrón no viene sino para matar, hurtar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia”. Esa vida digna que ofrece Jesús de Nazaret no es monopolio ni patrimonio exclusivo de los hombres, sino que es para toda la humanidad. Por eso, en donde se vulnera la seguridad, la salud, la dignidad o la vida de las mujeres, se está tirando por tierra el proyecto de Jesús.
La Alianza lamenta que en el actual contexto político se haya ignorado la necesidad de aprobar piezas legislativas como el pendiente Código Penal que debe incluir la interrupción de los embarazos en las tres causales.