Carmen Yulín Cruz Soto no ve diferencia entre dominicanos y puertorriqueños, ni por el color de la piel ni por el acento al hablar
San Juan (Puerto Rico).- La alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz Soto, erigida en la voz de los desamparados y quien ha sumado el reconocimiento de los sectores liberales de Estados Unidos por su enfrentamiento directo con el presidente Donald J. Trump ante la indolencia de su administración tras la devastación que experimentó Puerto Rico con el huracán María, es una aliada de la comunidad dominicana, que recibe atención sin importar su estatuto migratorio.
En medio del clima de supervivencia que prevalece, la alcaldesa capitalina recalca la importancia de no ver diferencia entre dominicanos y puertorriqueños, ni por el color de la piel ni por el acento al hablar.
“Para nosotros eso en San Juan siempre ha estado muy claro”, afirmó al recordar que la capital puertorriqueña es un santuario para los inmigrantes, por lo que reciben diversos servicios, desde atención médica hasta escolarización de sus hijos sin importar su situación migratoria.
Reveló que en la década de 1920 miembros de su familia emigraron a cortar caña en la provincia dominicana de La Romana, donde fueron recibidos con los brazos abiertos.
“Los hermanos de mi abuela Yulín Vega recibieron respeto y dignidad cuando fueron a La Romana a cortar caña, y nosotros tenemos que mostrarles respeto y dignidad a los dominicanos”, estableció la figura más prominente del ala soberanista del Partido Popular Democrático (PPD).
Como aliada de la comunidad quisqueyana, la alcaldesa hizo realidad en 2016, después de décadas de espera, la tan anhelada Casa Dominicana en un majestuoso edificio que se levanta en el sector de Villa Palmeras, en Santurce, cuya junta de directores preside el ingeniero dominicano Francisco “Pachín” Ramírez, vinculado ideológicamente al Partido Nuevo Progresista (PNP), que quiere la anexión a Estados Unidos.
“Creo en la unidad de una sola patria caribeña, que no quiere decir que dejemos de ser lo que somos”, recalcó Cruz Soto, quien mantiene un acuerdo de colaboración con el alcalde del Distrito Nacional de Santo Domingo, David Collado, y también ha apoyado con ambulancias al de Azua, Rafael Antonio Hidalgo Fernández.
Seleccionada como una de las 100 personas más influyentes del mundo en 2018 por la revista estadounidense Time, que valoró su determinación de denunciar al mundo la crisis en esta isla del Caribe sin que el poder imperial de Estados Unidos mostrara una mínima condescendencia, mientras literalmente mucha gente moría de hambre y de complicaciones de salud por falta de medicamentos o electricidad, cifra que hoy permanece como un enigma.
“Lo primordial es decirle a la gente que el país no está donde tiene que estar porque Estados Unidos no ha cumplido con su responsabilidad moral, ni tampoco la responsabilidad económica”, expuso a la agencia Inter News Service (INS). Cruz Soto, quien es acusada por la derecha boricua de socialista y aliada de Cuba y de Venezuela.
La alcaldesa de la capital puertorriqueña, que se perfila como candidata a la gobernación isleña en las elecciones generales de 2020, cuando se anticipa que enfrentará al actual mandatario Ricardo Rosselló Nevares, acaba de recibir un grado honorífico en Derecho de la Universidad de Boston, donde hace varios años se licenció en Ciencias Políticas.
Yulín, nombre que heredó de su abuela materna y que algunos confunden con un apodo, evita reclamar el heroísmo que muchos le atribuyen en Puerto Rico y que en Estados Unidos ha hecho ola a un nivel nunca visto en medio siglo con una personalidad de la política isleña.
“Los que han tenido la oportunidad de levantarse, que representan el gobierno de Puerto Rico no lo han hecho y han preferido estar arrodillados que levantarse para defender la dignidad del país de pie y de frente”, manifestó la primera ejecutiva capitalina en referencia a Rosselló Nevares, quien toleró la burla de Trump sobre las muertes conocidas inicialmente a causa del huracán María.
Abordada por la agencia INS, la presidenta del PPD en San Juan y quien está decidida a ir por la gobernación de Puerto Rico por cualquier vía, incluso mediante una coalición independiente que atraiga a soberanistas, independientes, independentistas y anexionistas, considera que, ante la situación prevaleciente “es evidente que el país ha sido tratado de manera distinta”.
“Porque somos una colonia, aquellos que no se pararon cuando se tenían que parar, que me criticaron cuando yo me paré —y me sigo parando—, le dieron permiso al gobierno de Estados Unidos para mirar para otro lado y para no atender las necesidades del pueblo puertorriqueño”, afirmó en entrevista con la agencia Inter News Sevice.
El drama causado en septiembre de 2017 por los huracanes Irma, en menor grado, y María, todavía se vive en municipios como Morovis, Adjuntas y Jayuya, en el centro, y las orientales islas municipios de Vieques y Culebra, con pequeños bolsillos en San Juan y otras ciudades, en particular Yabucoa (este), por donde entró el fenómeno destructor natural.
A ocho meses de la devastación, hay miles de personas carentes de servicios esenciales, lo que trae consigo un incremento en los suicidios y una reducción en la economía, ya que casi 500 mil personas han dejado la isla en los últimos dos años, mientras han llegado 500 multimillonarios atraídos por los incentivos que ofrece el gobierno a partir de la exención contributiva.
“¿Entonces, para quién es Puerto Rico? ¿Es para los puertorriqueños o para los que nos visitan? ¿Es para los que lo sudan o para los que vienen a coger los incentivos contributivos? Esas son las preguntas que los boricuas se tienen que contestar (porque) hay un desbarate total, como diría mi abuela”, manifiesta Cruz Soto.
Esta político de 55 años de edad, que proyecta una pasión enorme al hablar, no oculta su preocupación por el alza en el coste de la Universidad de Puerto Rico (UPR), de la que el gobierno de Rosselló Nevares y la Junta de Supervisión Fiscal (JSF), impuesta por Washington hace casi dos años para garantizar el pago de la deuda pública de 73 mil millones de dólares, no descarta que se cierren algunos de sus once recintos.
A esto se suma la clausura de unas 300 escuelas públicas en el país, con todas las implicaciones que conlleva para los padres y madres, con el fin de cortar gastos.
“El ridículo ha llegado a tanto que ahora quieren exportar hasta los presos (a Estados Unidos). Ya no es casualidad, tenemos que rendirnos ante la evidencia que aquí hay un proceso estructurado que cuenta con la ayuda y el contubernio del gobernador (Rosselló Nevares) y de la clase política para desmantelar el país”, advierte Cruz Soto, quien en 2008 fue elegida a la Cámara de Representantes de donde en 2013 pasó a ocupar la alcaldía de San Juan al derrotar, contra todo pronóstico, a Jorge Santini, quien estuvo 12 años en el cargo.