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El Cementerio Puerta del Cielo pasa a ser ahora la última morada del asesinado ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Orlando Jorge Mera.
Sin embargo, su legado, su forma, y trayectoria serán recordadas por la eternidad entre sus familiares, amigos y políticos como el ministro del “Corazón Verde”, de acuerdo con las palabras que en su honor expresaron algunos de sus parientes y allegados en el emotivo acto fúnebre.
La conmovedora ceremonia inició con la rendición de honores militares durante la entrada del ataúd al cementerio con el disparo de 21 salvas, como indica el decreto 298-22, emitido por el Poder Ejecutivo. Su féretro, cubierto con la bandera dominicana, era escoltado hasta llegar al área a donde fue su última morada, por su esposa doña Patricia Selma Villegas, sus hijos Orlando y Patricia Victoria y su hermana Dilia Leticia.
También escoltaron el ataúd la primera dama de la República Raquel Arbaje, los presidentes del Senado, Eduardo Estrella, y de la Cámara de Diputados, Alfredo Pacheco, mientras era esperado por cientos de personas, incluidos funcionarios del gobierno, que en sus rostros reflejaban tristeza.
Un servidor entregado a la decencia
Al pronunciar sus palabras ante el féretro de su amigo, a quien consideraba como un hijo, el periodista Guillermo Gómez, dijo que “conocía paso a paso su gestión responsable, honesta, y además un servidor entregado a la decencia en el comportamiento administrativo que tuvo” en el Ministerio.
“Nos juntamos con frecuencia para discutir problemas grandes que él enfrentaba con la responsabilidad que siempre ejerció, cumpliendo con su deber, cumpliendo con la ley y además con el corazón abierto para no dañar por capricho ni por nada algún ciudadano”, dijo.
Extrañaré nuestra complicidad
Un momento de mucha tristeza y dolor se vivió cuando su hermana Dilia Leticia Jorge Mera tomó la palabra y dijo frente al féretro que extrañará la complicidad que existía entre ambos.
“Extrañaré la complicidad, las risas, las conversaciones, los cafés, tus consejos, tu sabiduría. No siempre pensábamos iguales, pero nos queríamos y nos respetábamos tanto que nos apoyamos entre nosotros”, expresó en llantos.
Dilia Leticia, quien es viceministra de Innovación Transparencia y Atención Ciudadana del Ministerio Administrativo de la Presidencia, sostuvo que la relación que mantenía con su hermano estaba basada en el amor, admiración, apoyo y respeto a las decisiones de ambos.
Mi padre sacrificó su vida por el país
La hija de Orlando Jorge Mera, Patricia Victoria Jorge Villegas, en su corto discurso resaltó la labor y la entrega de su padre en su compromiso con el país y su familia.
“Esto todo es una tragedia, pero uno tiene que verlo desde los ojos de la fe. Y con los ojos de la fe, uno entiende que mi padre sacrificó su vida por este país, por la familia y por todos sus ideales, y por todos sus principios morales, por la honestidad que él tanto guardaba”.
Su esposa se despide en privado
Doña Patricia Selma Villegas, esposa de Orlando, no habló en público. Sin embargo, cuando terminó la ceremonia por dos ocasiones aprovechó la última oportunidad que tenía para tocar, besar y expresarle a quien fue su compañero de vida, el cariño y el amor que sentía por él. Aunque no se escucharon las palabras que se expresaba, las facciones de su cara denotaban que se trataba de expresiones de cariño.
Una hija entregada al señor y un hijo al país
Conteniendo sus lágrimas, el diputado Orlando Jorge Villegas resaltó las bondades de su padre, destacando que vivió una vida plena y desempeñando un buen rol como esposo, padre, amigo y servidor público.
Sostuvo que el equilibrio que existía entre sus padres doña Patricia Selma Villegas y Orlando Jorge Mera dio como resultado una hija entregada al señor y un hijo entregado al país.
“Papi tu era mi filtro, en lo personal, en lo profesional, en lo político, en todo”, fue una de las frases que marcaron las palabras de Jorge Villegas, quien, además, destacó que en medio del dolor y la tristeza que lo embarga siente la templanza, prudencia y tranquilidad que transmitía su padre. Indicó que su padre será recordado como el “ministro del Corazón Verde”. Minutos antes de ser sepultado, los familiares de Orlando, así como funcionarios, se acercaron al ataúd para colocarle girasoles, la flor favorita de la familia.
