Los años de esplendor de la plaza Jimenoa, frente a la universidad Intec, son cosas del pasado. Las fuentes que impresionaban a los visitantes ya no brotan agua y las raíces de los frondosos árboles sembrados allí han roto el pavimento de sus caminos.
El abandono y la oscuridad hacen que este espacio recreativo, ubicado en la avenida Los Próceres, próximo a la Rotonda José Martí, ya no sea frecuentado como antes. Las condiciones del tiempo han corroído el material de las escultura que adornaba el lugar y la descuidada arboleda le quita visibilidad.
Es así como algunos conductores aprovechan la sombra de este lugar para estacionar sus vehículos. Dentro de estos terrenos un furgón sirve de local para una banca de apuesta deportiva, frente a la academia.
Rechazo a banca en espacio público
Un estudiante que salía del residencial Jimenoa, que limita al norte con la plaza, con dirección hacia la universidad, se quejó de que las autoridades permitan la instalación de una banca de apuestas en este espacio público.
“A mí me cuentan que esto era todo un espectáculo, pero si lo fue ya no lo es” expresó el joven de 22 años, que prefirió no publicar su nombre.
Según cuenta Santiago Suero, que se encarga del mantenimiento del residencial colindante, en varias ocasiones ha tenido que arrancar las hierbas que crecen en la plaza. “Esto lo limpiaban la gente del Ayuntamiento y después lo echaron al abandono, las hierbas estaban bien altas ya, aunque ellos vienen a veces”, dijo. Residentes entrevistados sobre la situación pidieron la iluminación de esta plaza.