Si usted está en un país donde muchas leyes son letra muerta o están obsoletas y necesitan actualización; donde los cambios son lentos y difíciles de introducir; donde hay exceso de legisladores; donde es siempre dudosa la continuidad de medidas punitivas contra algún vicio; donde hay discriminación, pero no se reconoce, ese país es el nuestro, dolorosamente. Igualmente, si usted está en un país donde es siempre una incógnita si el presidente de turno se repostulará o no, pese a no poder hacerlo por impedimento constitucional; donde no es nada raro que el presidente de turno tenga en “suspenso” el país en cuanto a si se repostulará o no, pese a impedimento constitucional, usted está sí, en República Dominicana. ¡Vaya!