MANAGUA (AP) — Un grupo de derechos humanos de Nicaragua que ha documentado los asesinatos durante meses de conflicto político, cerrará sus oficinas debido a las múltiples amenazas de muerte y acoso.
La Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH) dijo en un comunicado publicado la noche del sábado que sus oficinas han asediadas por “grupos armados no autorizados y llamadas telefónicas de amenazas”.
También se quejó de las “prácticas ilegales de persecución judicial y criminalización sin fundamento legal que lo motive” contra sus empleados. No identificó a aquellos que considera responsables.
La ONG dijo que fuerzas de seguridad gubernamentales y grupos civiles armados aliados son responsables de la mayoría de las 448 muertes documentadas desde el 19 de abril. El presidente Daniel Ortega niega responsabilidad en los asesinatos y acusa a quienes exigen que renuncie al puesto de intentar un golpe de estado.
El gobierno ha reconocido el deceso de 195 personas durante los disturbios, mientras que la Organización de Estados Americanos reportó el jueves un conteo de 317 muertos.
La asociación de derechos ha sido una de las más activas en sus llamados por poner fin a la violencia y liberar a las personas arrestadas.
La ANPDH dijo la tarde del sábado que el cierre es necesario para resguardar la vida e integridad de sus colaboradores y que por ahora sólo tomará denuncias vía electrónica. Álvaro Leiva, director de la asociación, no pudo ser localizado de inmediato para comentar al respecto.
El reporte más reciente de la asociación indicó que 55 de los asesinatos ocurrieron en Masaya, al sureste de la capital y en donde los manifestantes montaron barricadas durante semanas en el vecindario de Monimbo, hasta que se realizó un operativo letal para despejar las calles.
“El doctor Leiva se la ha jugado (la vida) en medio de balas y mucha violencia, de no ser por él, quién sabe cuántos muertos más hubiera en Masaya”, dijo a la AP el párroco de la iglesia de San Miguel en Masaya, Edwin Román.