El despertar de la República Dominicana a la innovación tecnológica, de manera que no quede rezagada en la economía mundial, es lo que se ha propuesto de manera decidida la Oficina Nacional de Propiedad Industrial (ONAPI) con la celebración por segunda vez de la Competencia de Tecnología Apropiada.
Así lo afirmó la directora General de la ONAPI, Sandy Lockward, en el acto de premiación de la Competencia donde se anunciaron los tres proyectos ganadores, seleccionado de entre ciento cuarenta y dos proyectos propuestos. Más de un centenar que concursaron. La selección estuvo precedida de una eliminatoria para los diez primeros lugares que fueron ocupados por los siguientes desarrollos tecnológicos pertinentes para problemas locales:
- Maquinaria para descascarado y triturado del cacao
- Recolector de algas marinas y Sargazo
- Vehículo anfibio para minusválidos
- Maquinaria para enrollado de andullos de tabaco
- Resoplado de botellas plásticas para uso en la construcción
- Incubadora de pollitos con ahorro energético
- Cocina ecológica de combustión concéntrica
- Suavizante de ropa con ingrediente activo repelente de mosquitos
- Sistema de seguridad para vecindarios, por medio de una alarma
- Dispensador de insecticida a través de niebla seca
De estos 10 finalistas el jurado evaluador eligió tres ganadores. El primer lugar lo ganó Robert Manuel Encarnación Ramirez, con su proyecto Recolector de Algas, el segundo lugar le fue otorgado a Cesar Mejia Pérez, por el dispositivo y método para elaborar andullo y el tercer lugar fue para Pedro Disla Sánchez para una refinadora de cacao.
La competencia es celebrada por ONAPI con el patrocinio de la Oficina Coreana de Propiedad Intelectual (KIPO), la Agencia Coreana de Promoción de la Invención (KIPA) y la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI).
La doctora Lockward destacó que el eje medular de este concurso radica en difundir el uso de la propiedad industrial y especialmente la base de datos de patente, como fuente de innovación.
“Este concurso se realiza gracias al interés del gobierno de Corea en compartir elementos del modelo que tanto éxito económico le ha producido”. Explicó que el modelo coreano de desarrollo promueve de múltiples maneras la innovación tecnológica, el registro de los activos de propiedad industrial de ella derivada y el uso de la base de datos de patente como fuente para encontrar solución a problemas de la industria y la sociedad.
El uso de las bases de datos de patente es también vital para generar innovación incremental mejorando las patentes y modelos de utilidad que ya otros han registrado, ya sea con el propósito de aumentar el valor agregado de bienes y servicios o facilitar la vida diaria de los ciudadanos, destacó Lockward.
Agradeció a KIPO y KIPA por haber seleccionado a ONAPI como su puerta de entrada a la región de Centroamérica y República Dominicana, pues en el 2016 se llevó a cabo el primer concurso con éxito, lo que motivó a que este año el mismo se esté realizando de manera simultánea en Panamá, El Salvador y Costa Rica, dirigido por las respectivas oficinas de registro de Propiedad Industrial de esos países.
Todos los finalistas recibieron un certificado de excelencia emitido por la OMPI, los tres ganadores recibieron una medalla de la OMPI y un certificado de excelencia, el primer lugar ganó una visita a la República de Corea (KIPO) y un premio en efectivo de US$5,000.00; el segundo lugar un premio en efectivo de US$2,500.00 y el tercer lugar US$1,250.00.