Washington, 5 ago (EFE).- El expresidente de EE.UU. Barack Obama urgió este lunes a los estadounidenses “rechazar por completo el lenguaje que sale de la boca de cualquier líder que alimente un clima de miedo y odio o normalice sentimientos racistas”, en un comentario que parece aludir a su sucesor, Donald Trump.
Obama reaccionó en un comunicado a los recientes tiroteos en El Paso (Texas) y Dayton (Ohio), ocurridos en un intervalo de menos de 24 horas este fin de semana y que se han saldado con 22 y 9 muertos, respectivamente, según las últimas cifras oficiales.
El exmandatario pidió a sus conciudadanos rechazar a los líderes que “demonizan a quienes no se parecen a nosotros, o que sugieren que otras personas, incluyendo los inmigrantes, amenazan nuestro estilo de vida, o que se refieren a otra gente como subhumanos o que insinúan que EE.UU. pertenece solo a un cierto tipo de gente”.
Así, pidió a la “enorme mayoría” de estadounidenses “bien intencionados” de todas las razas, creencias y partidos políticos que rechacen abiertamente y de forma “clara e inequívoca” este tipo de comportamientos.
Aunque no lo citó por su nombre en ningún momento, los comentarios de Obama fueron ampliamente interpretados en EE.UU. como una feroz crítica al estilo de su sucesor en el cargo, el actual presidente Donald Trump, que ya ha sido durante las últimas horas objeto de censura por parte de otros políticos demócratas que lo vinculan con lo sucedido.
“Miren lo que (el presidente Trump) ha estado haciendo en este país. No ha estado tolerando el racismo, ha estado promoviendo el racismo. No ha estado tolerando la violencia, ha estado incitando el racismo y la violencia en este país”, afirmó este domingo Beto O’Rourke, aspirante a la candidatura presidencial demócrata y residente en El Paso.
En la misma línea se expresó Cory Booker, senador y también aspirante demócrata, quien remarcó que cuando “un presidente, desde el cargo más alto en nuestro país, habla de invasiones y plagas y países de mierda, esas cosas que salen de su boca dañan el tejido moral de nuestro país, él es responsable”.
Por su parte, el propio Trump condenó este lunes “el fanatismo y el supremacismo blanco” e instó a aplicar la “pena de muerte” para los autores de tiroteos masivos como los del fin de semana.
Se cree que Patrick Crusius, blanco de 21 años y sospechoso de la matanza de El Paso, publicó un manifiesto en internet antes del ataque que incluye motivos racistas claros y razonados, una planificación deliberada e intenciones xenófobas específicas.
En ese texto, supuestamente de su autoría, el joven habla de la necesidad de los “blancos” de detener la “invasión” de inmigrantes, especialmente la de los hispanos, y asegura que para preservar la cultura debe haber países separados para las diferentes “razas”. EFE