Santo Domingo, R.D. – Con un llamado a la unidad y al compromiso pastoral, el arzobispo metropolitano de Santo Domingo, monseñor Francisco Ozoria Acosta, presidió este Jueves Santo la tradicional Misa Crismal en la Catedral Primada de América, donde valoró el apoyo espiritual ofrecido por los sacerdotes ante la reciente tragedia ocurrida en la discoteca Jet Set.
Durante la eucaristía, que congregó a decenas de sacerdotes de la Arquidiócesis, monseñor Ozoria subrayó la importancia de vivir el sacerdocio en comunión y fraternidad, rechazando actitudes individualistas que debilitan la misión de la Iglesia.
“La comunión no es un ideal lejano, es un mandato de Cristo. Estamos llamados a vivirla desde lo cotidiano, en colaboración con nuestros hermanos y con el pueblo de Dios”, expresó el prelado.
El arzobispo destacó de manera especial la presencia de sacerdotes en el lugar del siniestro en Jet Set, quienes acudieron a brindar consuelo y asistencia espiritual a los afectados. Asimismo, reconoció el esfuerzo de los presbíteros que han ofrecido misas por las víctimas, incluso durante el cierre de la Cuaresma.
“Ese acompañamiento pastoral es una muestra viva del compromiso del clero con el sufrimiento humano. El sacrificio de quienes interrumpieron sus agendas litúrgicas para orar por los fallecidos es digno de admiración”, añadió.
Reafirmación de los votos sacerdotales
La Misa Crismal, una de las celebraciones más significativas de la Semana Santa, también fue ocasión para que los sacerdotes renovaran sus votos ante el pueblo y para la bendición de los óleos sagrados, que se utilizarán en bautismos, confirmaciones y unciones a lo largo del año.
El sacerdote Alfredo Montaño, presente en la ceremonia, aseguró que este tipo de celebraciones refuerzan la identidad y la misión del presbiterio dominicano. “Somos llamados a ser puentes de reconciliación y esperanza. En momentos difíciles, como los vividos tras la tragedia del Jet Set, nuestra labor espiritual se vuelve más urgente”, afirmó.