El obispo de la Diócesis de Baní, en la provincia Peravia, Víctor Masalles, expresó su consternación por el homicidio de Fernelis Carrión, de 16 años, hecho ejecutado presuntamente por un sacerdote. El adolescente fue ultimado a martillazos y puñaladas.
Masalles dijo que no importa la investidura que se tenga el abuso y la violencia deben ser castigados. También reclamó justicia en este caso, que ocurrió en el residencial Los Rosales, en Hainamosa, en Santo Domingo Este, donde vivía el sacerdote Elvin Taveras Durán y presuntamente lo mató y luego llevó su cuerpo a unos matorrales en la carretera Guerra-Bayaguana.
Masalles se refirió al tema a través de su cuenta de Twitter.
“El abuso y la violencia deben llevar a la justicia al que lo comete, y no importa la investidura tenga. Me uno en oración al dolor y al clamor de justicia de la familia de Fernely Carrión y de toda la sociedad”, posteó.
La Arquidiócesis de Santo Domingo suspendió de manera cautelar al sacerdote, quien está preso, y expresó su deseo de contribuir con las investigaciones. “Pedimos a las autoridades que, basados en la verdad de los hechos, apliquen las sanciones previstas en el Código Penal”.
El joven Fernelis salió de su casa en Villa Mella, Santo Domingo Norte, el pasado viernes supuestamente a casa del sacerdote Taveras Durán a buscar un dinero, de acuerdo a testimonios de parientes, pero no regresó, razón por la que acudieron a la Policía, que allanó la vivienda y lo apresó.