A propósito del apresamiento de César Emilio Peralta (César El Abusador), acusado de ser el capo de las drogas más buscado por las autoridades nacionales e internacionales en los últimos años y debido a las desarticulaciones recientes del crimen organizado, la Finjus planteó la necesidad de que el país cuente con una ley de Extinción de Dominio.
El vicepresidente ejecutivo de la Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus), Servio Tulio Castaños Guzmán, expresó que debido a los acontecimientos recientes, nuevamente sale a flote y a la luz pública, la necesidad de que en la República Dominicana exista una legislación que sirva como “un mecanismo efectivo que se oriente a contrarrestar el poder económico de las organizaciones criminales golpeando sus recursos financieros a fin de debilitarlas de forma progresiva hasta su inoperancia”.
Para sustentar su planteamiento, Servio Tulio Castaños Guzmán indicó que el auge de la criminalidad organizada y la significativa afectación que acarrean sus diversas manifestaciones en el seno de la sociedad conmina a que, desde el Estado y de manera intencional, se tracen estrategias eficaces para enfrentar dicho flagelo, especialmente en lo que respecta a la problemática que se presenta paralela a la persecución delictual. “Esto es el poder económico construido a partir de la ilicitud”, enfatizó.
“El ejercicio de actividades ilícitas genera cuantiosas utilidades que permite a las redes criminales y de corrupción lograr riquezas exorbitantes, aumentando así su capacidad de alcanzar el poder político y/o permear el aparato gubernamental buscando garantizarse impunidad. Esto, además de ir en desmedro del ciudadano común, quien no se beneficia de las mismas ventajas que de esa manera se consiguen, perjudica los principios que fundamentan el mercado económico pues se recurre a la inversión de las ganancias ilícitas en la economía formal creando una competencia desigual con aquellos que operan bajo el respeto a las reglas”, aseguró.