El abogado Namphi Rodríguez consideró “irracional, desproporcionada y temeraria” la campaña de descrédito emprendida por el embajador dominicano en España, Olivo Rodríguez Huertas, contra el Tribunal Superior Electoral (TSE).
Advirtió que con la misma se busca intimidar al Tribunal Constitucional (TC) para que no se pronuncie en contra los intereses del partido oficial en la sentencia pendiente sobre las leyes de Partidos Políticos y Régimen Electoral.
Rodríguez dijo que el diplomático envía una pésima señal al encabezar una campaña de “infundios” contra un tribunal independiente y sostuvo que esa práctica resquebraja la imagen del país ante los inversionistas de la Unión Europea, quienes perciben que en República Dominicana no existe independencia de los tribunales, ni seguridad jurídica.
Subrayó que se trata de “un espectáculo lastimero, que nunca se había visto en el país, un ejercicio irracional, temerario y desproporcionado” de un funcionario público tan importante para los intereses de la nación en la Unión Europea desacreditando a un órgano constitucional autónomo como el TSE”.
“El embajador parece una plañidera a la que se le paga para ir a llorar a un entierro, no entiende el sentido la frase del juez de la Corte Suprema de los Estados Unidos Robert H. Jackson, quien dijo que, los jueces no tienen la última palabra porque son infalibles, pero son infalibles porque tienen la última palabra”, subrayó.
Adujo que por la investidura de Rodríguez Huertas esto provoca cuestionamiento a la institucionalidad y a la independencia de los Poderes Públicos y los órganos constitucionales autónomos. A juicio de Namphi, pese a que el embajador Rodríguez Huertas ha desarrollado una activa gestión al frente de la legación diplomática dominicana en España, “no ha sabido guardar las formalidades propias de su investidura y se le ha visto enrolado en discusiones exaltadas y fuera de tono en las redes sociales o involucrarse en disputas de intereses privados.