El hombre que se prendió fuego el pasado lunes frente al Palacio de Justicia de Ciudad Nueva falleció la noche del jueves luego de permanecer varios días internado con quemaduras graves en el 95 por ciento de su cuerpo.
Así lo informaron ayer las autoridades del Hospital Ney Arias Lora, a donde fue llevado Concepción Polanco, de 66 años, luego de que se roció gasolina y se prendió fuego en demanda de justicia.
El hombre, que según una certificación médica que cargaba padecía de delirio de persecución, se encontraba ingresado en la Unidad de Quemados del Hospital Ney Arias Lora, con ventilación mecánica, pues, además, sufría de asma.
Desde el lunes, Polanco se encontraba en estado crítico. El fallecido se prendió fuego alegando que el Ministerio Público no le dio curso a una querella que interpuso en 2016 contra una mujer, que aseguró, intentó matarlo cuando supuestamente tuvo una discusión con la demandada.
Ese día acudió a la Fiscalía del Distrito Nacional a ver en qué estaba su querella y alegadamente no lo recibieron porque acudió sin un abogado. Minutos después se roció gasolina y fue socorrido por un hombre que estaba cerca, quien lo apagó con un extintor.
En los minutos siguientes al hecho, Polanco se encontraba hablando y caminando. Sobre esto, el doctor Eddy Bruno, director de la Unidad de Quemados del Hospital Ney Arias Lora, ha explicado que en estos casos los pacientes quemados en las primeras 24 horas o 48 horas la pasan normal, a menos que no tengan quemaduras de mucha envergadura y que a las 72 horas o el quinto día el problema se agrava cuando su metabolismo y órganos comienzan a pedir la reserva.
El lunes, el doctor Bruno dijo que el hombre de 66 años, era un paciente bastante crítico.
El galeno indicó que el fallecido padecía de varias comorbilidades y que lamentablemente, pacientes en esas condiciones tienen una alta tasa de mortalidad.