La directora de Persecución del Ministerio Público, Yeni Berenice Reynoso, reveló ayer que en el caso Medusa hay nuevos imputados en el supuesto entramado de corrupción que existía desde la Procuraduría General de la República (PGR).
La procuradora adjunta sostuvo que este caso es un proceso complejo que tiene miles de pruebas que demuestran la culpabilidad de los encartados y que en los próximos días estarán depositando la acusación formal.
Ayer, el Cuarto Juzgado de Instrucción del Distrito Nacional aplazó para el próximo 20 de diciembre la revisión obligatoria de la medida de coerción impuesta al exprocurador general de la República, Jean Alain Rodríguez, y el director de Tecnología de la Información de esta entidad, Javier Alejandro Forteza Ibarra.
La directora de Persecución explicó que el aplazamiento se produjo en virtud de que el órgano persecutor incorporó nuevas pruebas al caso y que no le fueron notificados a la defensa.
La defensa del exprocurador presentó ayer una querella disciplinaria en contra de la jueza Kenya Romero, quien dictó prisión preventiva el pasado mes de julio.
Según la defensa de Rodríguez, en el juicio de medida de coerción la jueza permitió que se “atropellara, violentara y avasallara” a su cliente “incumpliendo las debidas responsabilidades de fungir como árbitro en control de la observancia de la Constitución”.
Además del exprocurador y el director de Tecnología, también guardan prisión los imputados Alfredo Alexander Solano Augusto y Jonnathan Josel Rodríguez Imbert. Mientras que los imputados Rafael Mercedes, Jenny Marte y Altagracia Guillén, tienen arresto domiciliario; Miguel Moya, garantía económica de un millón de pesos e impedimento de salida. Mientras que Rafael Stefano Canó Sacco está arrestado en España.