Luego de los intensos debates entre el Ministerio Público y la defensa de los imputados del caso Medusa sobre el plazo que sería prudente para que los 63 vinculados en el proceso estudien la acusación en su contra, el juez Amauri Martínez tomó una decisión.
El juez del Tercer Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional pasada a las 5:00 de la tarde se retiró a ponderar y regresó al estrado pasadas las 9:00 de la noche con su decisión.
Aplazó la audiencia preliminar del caso Medusa para el 24 de febrero a las 9:00 de la mañana y otorgó un plazo de 30 días para que la defensa de los 41 imputados y las 22 empresas estudien la acusación en su contra.
Previo a estos 30 días hábiles, además, el juez decidió otorgar un plazo de 5 días, a partir de mañana martes, para que los abogados de los imputados notifiquen al Ministerio Público los inconvenientes que han tenido con los discos duros que contienen la acusación.
Vencido este plazo, el Ministerio Público tendrá ocho días, para que sus técnicos, conjuntamente con la secretaria del tribunal, acompañen a los abogados a los fines de que se haga las correcciones a los discos duros que contienen la acusación, en los que los imputados recibieron el expediente, y que los encartados han dicho que han presentado problemas.
Luego el órgano persecutor tendrá un plazo de 10 días para preparar un informe con los previamente ordenados por el juez Amauri Martínez.
El magistrado Martínez rechazó la solicitud de la entrega del expediente de manera física que le hiciera la defensa de los imputados. El juez ponderó que uno de los motivos por lo que fue rechazada esta solicitud es que la entrega física contribuiría a la destrucción del medio ambiente.
De esta manera concluyó la jornada del juicio preliminar del caso Medusa y sus 63 personas y empresas acusadas de soborno, estafa contra el Estado, coalición de funcionarios, falsedad de documentos y lavado de activos.
