El juicio de fondo en contra del comunicador Pablo Ross, acusado de abuso sexual contra su hijastra menor de edad, inició ayer luego de ser aplazado en dos ocasiones.
El caso es conocido por el Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional, el cual es presidido por la jueza Giselle Méndez, donde se determinará si Ross es culpable o inocente de los cargos que pesan en su contra.
En caso de ser declarado culpable el imputado puede ser condenado a una pena de hasta 20 años de reclusión carcelaria.
Ross cumple desde septiembre del pasado año prisión preventiva como medida en el Centro de Corrección y Rehabilitación Najayo-Hombres.
En la otra ocasión que asistió a la audiencia, la cual fue aplazada, Ross aseguró ayer que se encuentra “excelente”.
Al ser preguntado por periodistas cómo se encontraba, el imputado indicó que se siente “muy, bien, excelente”.
Cuando era trasladado a la sala de audiencias también dijo “que hay que esperar”. Asimismo, le dijo a la prensa que “gracias por estar tan atentos a este caso”.
El Ministerio Público asegura que el acusado, durante cuatro años, aprovechaba cuando se encontraba a solas con la adolescente para abusar de ella, mientras le decía que sentía envidia del novio de ésta, ya que “tenía lo que él no podía tener”.
Asimismo, indicó que el comunicador le decía a la adolescente que su madre no podía enterarse de lo que sucedía y que habría confesado que abusaba de su hijastra, de 16 años, de acuerdo con la madre de la menor.
El mercadólogo, quien está acusado de incesto, habría confesado que abusaba de su hijastra, de 16 años, según consta en el expediente que presentó el Ministerio Público, ahí además se detallan como prueba a cargo varios interrogatorios, entre ellos el de la madre y el padre de la joven.
