La jueza Lissa Veras impuso este lunes tres meses de prisión preventiva al hombre acusado de matar al joven Jesús Cuevas, cuyo cadáver fue encontrado desmembrado dentro de un tanque.
Francisco Javier García (Antony) deberá cumplir la medida de coerción en el Centro de Corrección y Rehabilitación San Cristóbal (CCR-XX).
La magistrada de la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional dictó la medida coercitiva al entender que hay elementos suficientes para investigar el hecho en un corto plazo
De acuerdo a lo informado, el Ministerio Público había solicitado la prisión preventiva por un año.
El imputado Francisco Javier García (Antony) fue asistido por un defensor público, el cual le fue asignado por el tribunal. El abogado privado que el acusado dijo que lo defendería se ausentó en la audiencia de ayer y la de hoy.
Alias Antony es acusado de matar a Jesús Cuevas con un arma blanca, desmembrar su cuerpo e introducirlo en un tanque, donde permaneció por un mes.
Según explicó el abogado de la familia de Jesús, Juan Aquino, durante la audiencia el imputado no pronunció una sola palabra. “Guardó silencio, prácticamente asumió una posición donde ni prestaba atención a lo que estaba pasando en el momento”, aseguró
Al ser preguntado si estaban conformes con la decisión del tribunal, el jurista dijo que nunca va a ver conformidad ni aunque sentenciarán al imputado a la silla eléctrica.
“Perder a una familia en las condiciones en que lo perdieron. Debemos de recordar que tratando sobre el tema de la desaparición, la angustia que un ser humano, que una familia tiene que vivir en el proceso de no saber cuál es el destino de su familia, hoy en día pueden tener cierre, un proceso de resiliencia, poder tratar de sanar, pero oh Dios, bajo qué circunstancias”, expresó Aquino.
Sobre el hecho
El acusado fue apresado el pasado jueves en la noche por agentes policiales, a quienes les habría confesado el crimen.
De acuerdo a las investigaciones del Ministerio Público, Jesús desapareció la tarde del jueves 7 de octubre pasado. Sus familiares denunciaron que este fue visto por última vez en la avenida Winston Churchill, próximo a la Gustavo Mejía Ricart, donde lo dejó una compañera tras salir del trabajo.
Un mes después, el 4 de noviembre, tras las diligencias investigativas que incluyeron varios allanamientos y la revisión de cámaras de seguridad, las autoridades encontraron los restos de la víctima.
El cadáver estaba dentro de un tanque azul en una residencia ubicada en el kilómetro 7 de la carretera Sánchez, donde reside el imputado García Quezada, quien admitió que había apuñalado y descuartizado al joven por el problema de una supuesta deuda de RD$10,000.00 que Jesús tenía con él.
La Policía Nacional informó que en la vivienda fueron encontradas herramientas como seguetas, cuchillos, martillos y otras evidencias, que presuntamente fueron utilizadas para causarle la muerte al joven.
De su lado, la Fiscalía otorgó al presente caso la calificación jurídica de asesinato, previsto y sancionado por los artículos 295, 296, 297, 302 y 309 del Código Penal Dominicano, así como los artículos 83 y 86 de la Ley 631-16, que regula el uso de armas, municiones y materiales relacionados.