Militantes del PLD, periodistas y vehículos resultaron afectados por incidentes con bombas lanzadas por PN
La jueza Kenya Romero, coordinadora del juzgado de Atención Permanente del Distrito Nacional, aplazó para este miércoles 29, a las 9:00 de la mañana, el conocimiento de medida de coerción a los 20 imputados en el denominado caso Calamar.
Mientras esto acontecía, a las afueras del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva, en donde se conocía el destino de los acusados, se manifestaban decenas de dirigentes y miembros del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) así como personas que decían pertenecer al movimiento Marcha Verde.
A unos 200 metros, en la Casa Nacional del PLD, tras ser concluida una rueda de prensa, militantes de ese partido decidieron marchar hacia el órgano de justicia, siendo repelidos por agentes antimotines de la Policía Nacional mediante bombas lacrimógenas al igual que quienes protestaban a las afueras del edificio en Ciudad Nueva.
El conocimiento de la medida de coerción a Gonzalo Castillo, excandidato a la Presidencia por el partido morado, y demás señalados en el caso, que estaba pautado para ayer a las 9:00 de la mañana, fue pospuesto porque en medio de la Sala de Audiencia del Primer Tribunal Colegiado presentaron dos querellas adicionales depositadas con anterioridad ante el Ministerio Público con sus elementos de prueba.
La magistrada Romero escuchó a todas las partes procesales, quienes expusieron que era necesario mover la fecha a fin de resguardar el derecho de defensa de los imputados y verificar esos elementos adicionales presentados por las personas a las cuales van dirigidas esas nuevas piezas.
Esta fue la segunda ocasión en que aplazan la medida de coerción solicitada por el Ministerio Público; la primera fue el pasado martes. El órgano acusador pide 18 meses de prisión preventiva para los acusados.
A su salida de la audiencia, Wilson Camacho, titular de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca), explicó que “la estructura de corrupción” afectó tanto intereses públicos como privados, por lo que “los intereses privados se han acercado al Tribunal con la intención de ser parte del proceso”.
Manifestaciones repelidas; periodistas resultan agredidos
Desde tempranas horas de la mañana de ayer, las inmediaciones del Palacio de Justicia estaban resguardadas por un amplio dispositivo policial que impedía la entrada al edificio de personas no autorizadas.
“¡Estamos en la calle y no tenemos miedo!” y “¡El PLD unido jamás será vencido!”, exclamaban decenas de dirigentes y miembros del PLD en un extremo del plantel de Justicia, quienes, además, pedían libertad pura y simple para los imputados en la supuesta red de corrupción administrativa.
Junto a ellos había un pequeño grupo de personas que decían ser del movimiento Marcha Verde de Santo Domingo Este, con pancartas de exfuncionarios “perremeístas” destituidos de sus puestos por supuesta corrupción; pedían que también fueran procesados.
En el otro extremo del edificio del Palacio se pronunciaban personas en respaldo al Ministerio Público, quienes pedían que “se devuelva lo robado”; decían ser los verdaderos miembros de Marcha Verde y que el pequeño grupo del lado opuesto era infiltrado. Mostraron un documento en el cual justificaban el permiso para apostarse en ese lugar.
Mientras pasaban los minutos el ambiente se hacía más tenso, al grado, que agentes policiales lanzaron bombas lacrimógenes “para controlar la situación”, resultando varias personas heridas y vehículos afectados.
Las manifestaciones se extendieron a la Casa Nacional del partido morado tras concluir la segunda reunión del Comité Central. Allí los presentes también fueron dispersados por las bombas lanzadas por los agentes antimotines.
Moisés Mejía, del canal ENTelevisión; y Jorge Luis Martínez, fotorreportero del Listín Diario, resultaron afectados durante los incidentes por las bombas lacrimógenas mientras cubrían para los respectivos medios.
En un video, se verifica a Mejía sentado en las escalinatas de la Casa Nacional del PLD con la cabeza hacia suelo, mientras que Martínez, fue agredido por agentes policiales cuando intentó esconderse de las bombas lacrimógenas.
Además, la yipeta de la regidora peledeísta por el municipio de Bonao Fiordiliza Pichardo resultó incendiada en la parte de atrás, producto de una bomba. Los agentes, al percatarse de lo sucedido, echaron arena para sofocar el fuego.
Las acciones de los miembros policiales fueron condenadas por la cúpula del partido de la estrella amarilla, sumándose otros partidos.
FP y PRD se solidaron con PLD; PN niega lanzara bombas a local
Los partidos Fuerza del Pueblo (FP) y Revolucionario Dominicano (PRD) se pronunciaron en contra de la acción policial ejecutada contra la protesta que realizaban los dirigentes del Partido de la Liberación Dominicana, frente a su local, en la avenida Independencia, del Distrito Nacional.
En tanto, el vocero de la Policía Nacional negó que las autoridades lanzaran bombas lacrimógenas hacia el interior de ese recinto. En rueda de prensa, Diego Pesqueira sostuvo que las bombas lacrimógenas se lanzaron a manifestantes que intentaron irrumpir sin permiso en zonas restringidas y acordonadas por los efectivos policiales.