Cinco de los imputados en el caso Coral ya han presentado sus alegatos a la jueza Yanibet Rivas, en busca de convencerla de no enviarlos a juicio de fondo, como le solicitó el Ministerio Público en audiencia pasada.
Los últimos en defenderse ante la magistrada del Sexto Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional fueron el general Boanerges Reyes Batista y el capitán de navío Franklin Mata Flores, acusados de formar parte de la presunta red de corrupción, que habría liderado el mayor Adán Cáceres, para desviar miles de millones de pesos de entidades castrenses.
Ambos militares están siendo defendidos por el abogado Waldo Paulino, que ha dicho que están pidiendo a la jueza dictar auto de no ha lugar por insuficiencia de pruebas.
“El Ministerio Público trajo tres mil y pico de pruebas al plenario que no fueron presentadas ni mostradas a la defensa técnica, por lo cual dichas pruebas no llevaron la analogía del contradictorito por parte de la defensa técnica”, dijo el jurista.
A su entender, no existen elementos probatorios que puedan ocasionar que la jueza Rivas envíe a juicio de fondo a sus clientes. “Las pruebas resultan insuficientes”, reiteró al hablar con la prensa, luego de que la audiencia preliminar fuera aplazada para el viernes.
El aplazamiento se produjo debido a que el imputado teniente coronel Erasmo Roger pidió cambiar de abogado. Ante esto, la jueza Rivas decretó el abandono del jurista y le dio al imputado un plazo de 48 horas para buscar uno nuevo o de lo contrario se le designará un defensor público.
Sobre lo planteado por la defensa, los abogados del Estado aseguraron que el Ministerio Público si cuentan con los elementos suficientes para que el caso pase a juicio de fondo y se juzguen a las 30 personas y 18 empresas acusadas de defraudar al Estado con más de 4,000 millones de pesos.