Un bebé japonés que pesaba solo 258 gramos y medía 22 centímetros al nacer está a punto de dejar el hospital donde permanece internado desde hace casi 7 meses, informa The Japan Times.
Ryusuke Sekino nació el 1 de octubre por cesárea en la semana 24 del embrazo, después de que su madre, Toshiko, ingresara al hospital tras sufrir problemas de hipertensión.
En el Hospital Infantil de Nagano, ubicado en la ciudad Azumino, el bebé recibió cuidados intensivos neonatales. Los médicos usaron sondas para alimentarlo y a veces incluso tuvieron que darle la leche de su madre con hisopos de algodón.
Gracias a los esfuerzos de los médicos, Ryusuke aumentó 13 veces su peso y ahora tiene más de 3 kilos.
“Hubo dificultades durante el tratamiento porque, inmediatamente después de su nacimiento, sus vasos sanguíneos eran demasiado delgados para administrar goteo intravenoso”, afirmó el doctor Takehiko Hiroma, según cita la agencia Kyodo News.
“Cuando nació era muy pequeño y parecía que se iba a romper al tocarlo. Yo estaba muy preocupada”, contó la madre, señalando que está feliz de poder verlo crecer.
Ryusuke batió un ‘récord’ al ser 10 gramos más liviano que otro bebé nacido en Japón el año pasado. Asimismo, se convirtió en el bebé más pequeño del mundo.