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Jerusalén, 5 oct (EFE).- Un número aún indefinido de cohetes impactaron este sábado en un edificio en la localidad árabe de Deir al Asad, a unos 20 kilómetros de la frontera norte de Israel, provocando tres heridos leves, según recogió el diario The Times of Israel.
Por el momento no hay una reivindicación específica del ataque, aunque las milicias proiraníes de Irak reivindicaron hace unos minutos ataques contra “tres objetivos vitales” en el norte, sin detallar dónde.
Los equipos de emergencia informaron de que están tratando “a 10 personas por síntomas de ansiedad”, y tres heridos fueron trasladados al Centro Médico Galilea de la ciudad vecina de Nahariya.
Al menos un proyectil golpeó la última planta de un edificio aparentemente residencial de Deir al Asad, según muestran los vídeos grabados por civiles en el lugar, y en los que se observa como la azotea de la vivienda quedó llena de escombros.
Los impactos en esta comunidad árabe se producen tras una mañana en la que las sirenas antiaéreas han sonado en el norte de Israel más de una decena de ocasiones, también en la ciudad portuaria de Haifa, la tercera mayor del país.
“Siguiendo a las sirenas que sonaron en las áreas de la bahía de Haifa, Carmel y HaAmakim, dos proyectiles fueron identificados cruzando desde el Líbano hacia territorio israelí”, informó el Ejército a medio día de este viernes.
Uno de los cohetes fue interceptado por las Fuerzas del Aire, mientras que el otro cayó en un espacio abierto.
Una hora antes, la aviación tuvo que interceptar otro proyectil que entró a territorio israelí por la zona de Adamit, en el noroeste del país.
Ayer, además, dos soldados israelíes murieron y otros 24 resultaron heridos en el norte de Israel por el ataque de un dron reivindicado por las milicias proiraníes de Irak.
El intercambio de fuego cerca de la frontera con el Líbano, no sólo con Hizbulá sino también con estas milicias, se ha intensificado en las últimas semanas en respuesta a las operaciones israelíes en el país vecino, con constantes bombardeos contra el sur del país, el valle de la Becá en el este y la capital, Beirut.
La tensión creció aún más cuando, en la madrugada del martes, Israel lanzó una incursión terrestre -“limitada”, según las fuerzas armadas- en el sur del Líbano, en la que hasta ahora han muerto 9 militares hebreos y unos 400 milicianos del grupo chií.
Desde el comienzo de las hostilidades, los ataques de Israel han matado a casi 2.000 personas y han obligado a 1,2 millones a abandonar sus hogares, principalmente en el sur y el este del país mediterráneo. EFE
