Cuatro personas murieron en el asalto por parte de seguidores del presidente al Capitolio en Washington
La ciudad de Washington vivió ayer una jornada de caos inédita, que se saldó con cuatro muertos y 14 heridos, debido al asalto por parte de seguidores del presidente Donald Trump de la sede del Congreso cuando los legisladores certificaban la victoria electoral del demócrata Joe Biden.
Al grito de “Trump ganó”, cientos de seguidores del mandatario irrumpieron en el Capitolio tras desbordar a la policía que lo custodiaba, y que provocaron caóticas escenas con trumpistas recorriendo los pasillos con banderas o sentándose en los escaños.
Durante estos incidentes, una simpatizante de Trump identificada como Ashli Babbit, vecina de San Diego (California), resultó herida de bala y falleció tras ser trasladada a un hospital, según confirmaron fuentes policiales a varios medios.
La mujer, una veterana de la Fuerza Aérea, presentaba una fuerte hemorragia ocasionada por un disparo en el cuello efectuado por un miembro de la seguridad de la sede legislativa durante el asalto, que se prolongó varias horas y que obligó a interrumpir la sesión.
Cuatro personas murieron y al menos 14 policías resultaron heridos durante el asalto al Capitolio de EE.UU..
Las autoridades de Washington habían informado inicialmente de la muerte de una mujer, que falleció como consecuencia del disparo de la Policía del Capitolio, pero después actualizaron esa cifra.
Otras tres personas, que fueron no identificadas, fallecieron como consecuencia de “urgencias médicas” que sufrieron en las instalaciones del Capitolio, dijo el jefe de la Policía Metropolitana de Washington, Robert Contee.
El funcionario no dio más detalles sobre esas muertes y agregó que 14 agentes de policía resultaron heridos durante los incidentes en el Capitolio, dos de ellos de forma “grave”.
Las autoridades detuvieron al menos a 52 personas tanto en el Capitolio como en otros rincones de la capital estadounidense, de las cuales unas 30 fueron arrestadas por violaciones del toque de queda que impuso la Alcaldía de Washington a partir de las 18.00 horas (23.00 GMT).
El asalto al Congreso se produjo poco después de que los manifestantes hubieran sido arengados frente a la Casa Blanca por el presidente saliente, quien les repitió la retahíla de denuncias de fraude infundadas en las que insiste desde que se confirmó su derrota en las elecciones de noviembre pasado, sin demostrarlas.
“No cederemos nunca, nunca concederemos (la victoria)”, dijo Trump a los miles de congregados a las afueras de la Casa Blanca para la marcha “Salvar a EEUU”, que partió al Capitolio.
En la sede del Congreso, los legisladores se encontraban reunidos para celebrar la ceremonia de validación formal del resultado de las elecciones de noviembre, en las que el demócrata Joe Biden se impuso a Trump.
A partir de su llegada al Capitolio se registraron las primeras escaramuzas entre los revoltosos y los agentes que custodiaban el lugar, que en inferioridad numérica y armados solo con aerosoles de gases lacrimógenos no pudieron contener a la multitud.
En el momento del asalto al emblemático edificio, los legisladores habían suspendido su reunión para debatir las objeciones presentadas por los republicanos a los resultados en las elecciones en Arizona, uno de los primeros por orden alfabético.
A partir de ahí, el caos y escenas nunca vistas en Washington, con cristales rotos, puertas quebradas y peleas con disparos en el interior del Congreso entre seguidores de Trump y la Policía, que desalojó a los legisladores a tiempo y los llevó a un lugar seguro.
Las imágenes de las televisiones y las captadas por testigos dentro del lugar mostraron cómo los seguidores del mandatario saliente paseaban libremente por los pasillos e incluso llegaron a entrar en los despachos de los legisladores.
Algunos de ellos lograron acceder al pleno de la Cámara de Representantes e incluso uno se sentó en uno de los asientos destinados para los discursos oficiales al grito de “Trump ganó”.
El Capitolio pudo ser despejado más de tres horas después del inicio del asalto, poco antes de entrar en vigor a las 18 horas (23 GMT) el toque de queda decretado de manera urgente por la alcaldesa de la capital, Muriel Bowser, y se restableció la seguridad.
Lo que sigue
El Senado de EE.UU. rechazó una objeción al resultado de las elecciones de noviembre en el estado de Pensilvania, el último obstáculo que planea revisar antes de que el Congreso ratifique la victoria de Biden.
Por 92 votos a favor y 7 en contra, el Senado votó para desestimar una objeción a los resultados en Pensilvania que habían presentado legisladores republicanos en la Cámara Baja con el apoyo de un senador conservador, Josh Hawley.
La Cámara de Representantes también rechazó el intento de impedir la certificación de Biden, con una votación 303-121.
Nunca hubo ninguna perspectiva de que las objeciones presentadas en el Congreso prosperaran, puesto que cada uno de ellos debe superar una votación en el pleno y los demócratas, el partido de Biden, son mayoría en la Cámara de Representantes.
Según la ley estadounidense, para desencadenar un debate y una votación en el Congreso sobre la posibilidad de rechazar el resultado en un estado, es necesario contar con al menos un congresista y un senador que apoyen la idea.
La objeción en el caso de Pensilvania provocó que la sesión conjunta en el Congreso entrara en receso, para que cada una de las dos cámaras debatieran por separado sobre el tema, aunque el Senado pasó directamente a votar.
Unas horas antes, el Congreso votó también a favor de respetar el resultado de las elecciones en Arizona: el intento de rechazar lo votado en ese estado fracasó por 93 votos contra 6 en el Senado y por 303 contra 121 en la Cámara de Representantes.
El debate sobre el resultado en Arizona había comenzado a primera hora de la tarde, pero quedó interrumpido por el asalto al Capitolio de los simpatizantes de Trump. Al reanudar la sesión seis horas después, una vez despejado el Capitolio, ambas cámaras del Congreso continuaron el debate sobre Arizona, y después sobre el resto de estados que votaron el pasado 3 de noviembre para elegir a Biden.
Líderes mundiales en conmoción
Mandatarios de todas partes del mundo condenaron la toma del Capitolio de Estados Unidos por parte de los partidarios del presidente Donald Trump y expresaron conmoción por el caos que se estaba desarrollando en una nación a la que alguna vez confiaron el liderazgo mundial.
“Escenas lamentables en el Congreso de Estados Unidos”, tuiteó el primer ministro Boris Johnson, de Gran Bretaña, una nación aliada incondicional durante generaciones.
“Estados Unidos representa la democracia en todo el mundo y ahora es vital que haya una transición pacífica y ordenada del poder”.
Otros aliados europeos estaban igualmente horrorizados por lo que describieron como un ataque a la democracia estadounidense. Algunos criticaron directamente a Trump.
“Trump y sus partidarios deberían aceptar finalmente la decisión del electorado estadounidense y dejar de pisotear la democracia”, tuiteó Heiko Maas, ministro de Asuntos Exteriores de Alemania.
“De las palabras incendiarias vienen los hechos violentos”, añadió, y puntualizó que “el desprecio por las instituciones democráticas tiene efectos desastrosos”.
El presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli, quien dirige una de las legislaturas más grandes del mundo, también condenó las escenas en el Capitolio.
La Unión Europea ha pasado cuatro años lidiando con el gobierno de Trump, y sus principales funcionarios han dicho en repetidas ocasiones que esperaban una mejor relación con el presidente electo Joe Biden. “Esto es insurrección.Nada menos. En Washington”, tuiteó Carl Bildt, ex primer ministro de Suecia.
Turquía, aliado de la OTAN y que en ocasiones ha tenido dificultades con Washington, expresó inquietudes en torno a las escenas de enfurecidos simpatizantes de Trump ingresando al Capitolio en un intento de frustrar la confirmación de Biden como el nuevo presidente estadounidense. El caos provocó que los legisladores fueran evacuados del inmueble.
Un comunicado emitido por el Ministerio de Asuntos Exteriores de Turquía exhortaba a todas las partes en Estados Unidos a ser “moderadas” y utilizar “el sentido común”. “Creemos que Estados Unidos superará esta crisis política doméstica con madurez”, señaló el ministerio. El comunicado también exhortaba a los turcos que se encuentren en Estados Unidos a mantenerse alejados de las multitudes y de las manifestaciones.
RD lamenta situación
El Gobierno dominicano condenó los actos de violencia ocurridos esta tarde en el Capitolio de Estados Unidos. “Hacemos el más enérgico llamado al cese de la violencia y a la transferencia pacífica del poder”, expresó la cancillería en un tuit.
Demócratas se alzan con el control del Senado
Los demócratas se alzaron ayer con el control del Senado de Estados Unidos gracias a las victorias de sus dos candidatos en la segunda vuelta de las elecciones en Georgia, que el presidente Donald Trump había planteado como un referéndum a su gestión. Después de que el martes, se confirmase la victoria de Raphael Warnock, que se convierte así en el primer senador afroamericano de Georgia, las proyecciones de los medios dieron ganador al también demócrata Jon Ossoff, sobre su rival republicano, David Perdue.