WASHINGTON. El presidente Donald Trump firmó una orden ejecutiva para reinstaurar varias sanciones contra Irán, tres meses después de salirse del acuerdo nuclear. La política de Estados Unidos es imponer una “máxima presión económica” al país, dijo el mandatario.
En una declaración del lunes, Trump volvió a exponer su opinión de que el acuerdo internacional de congelar el programa nuclear de Irán a cambio de quitar las sanciones fue un “acuerdo horrible, unilateral”. Dejó al gobierno iraní forrado de efectivo para avivar el conflicto en el Medio Oriente, agregó.
El presidente iraní Hasán Ruhani respondió al anuncio de las sanciones demandando compensación por décadas de intervención estadounidense en la República Islámica.
Aunque dijo que no tiene precondiciones para negociar, Ruhani mantuvo en una entrevista televisada en vivo que Irán puede depender de China y Rusia para ayudar a sus sectores petrolero y bancario mientras Washington incrementa sus sanciones en los próximos meses.
Trump dijo que el gobierno de Estados Unidos exhorta a todas las naciones “a dejar claro que el régimen iraní enfrenta una opción: o cambia su comportamiento amenazante y desestabilizador, y se reintegra a la economía global, o sigue por el camino del aislamiento económico”.
Advirtió que aquellos que no reduzcan sus vínculos con la economía iraní se “arriesgan a consecuencias severas” bajo las sanciones reinstauradas.
El secretario de Estado Mike Pompeo dijo que las renovadas sanciones estadounidenses van a ser implementadas enérgicamente y seguirán en vigor hasta que el gobierno de Irán cambie su curso.
Hablando con reporteros de regreso de una gira por tres países en el sudeste asiático, Pompeo dijo que la reimposición de algunas sanciones es un importante pilar de la política estadounidense hacia Irán. Dijo que el gobierno de Trump está dispuesto adoptar otra postura, pero que eso requeriría un “enorme cambio” por parte de Teherán.