Washington.- El presidente de EE.UU., Donald Trump, dio este martes un espaldarazo a la gestión de su homólogo de Brasil, Jair Bolsonaro, en un momento de choques entre el mandatario brasileño y el francés, Emmanuel Macron, y de polémica por la reacción de Brasilia a los incendios forestales en la Amazonía.
En una serie de mensajes en su cuenta oficial de Twitter, Trump defendió su actuación en la cumbre del G7 recién concluida en Biarritz (Francia) y lanzó una crítica velada a Puerto Rico y otra abierta a la Reserva Federal (Fed), además de pronunciarse sobre la crisis política en Italia y la gestión de Bolsonaro.
“He podido conocer bien al presidente @jairbolsonaro en nuestros contactos con Brasil. Está trabajando muy duro en los incendios de la Amazonía, y en todos los sentidos está haciendo un gran trabajo para el pueblo de Brasil, y eso no es fácil”, afirmó Trump.
“¡Él y su país tienen el apoyo completo de los Estados Unidos!”, agregó.
Ese tuit llegó poco después de que Bolsonaro afirmara que solo aceptará la ayuda de 20 millones de dólares que el G7 le ha ofrecido para combatir el fuego en la Amazonía si Macron se retracta antes por haberlo tratado de mentiroso.
Bolsonaro daba así un paso más en la trifulca que mantiene con Macron a raíz de su decisión de restar importancia a los incendios en el pulmón verde del planeta, y que ha derivado en ataques personales y amenazas comerciales.
El mandatario francés acusó a Bolsonaro de mentir sobre sus compromisos medioambientales, amagó con no ratificar el acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea (UE) y Mercosur, e incluso sugirió la posibilidad de darle un “estatus internacional” a la Amazonía para impedir su destrucción.
El “apoyo completo” a Bolsonaro que expresó Trump en su tuit evidenció de nuevo su fuerte alianza con el ultraderechista líder brasileño y la brecha que le separa del resto del G7 en lo relativo a la crisis climática, después de haberse ausentado de la sesión dedicada a ese tema en la cumbre de Biarritz.
Trump también rompió el protocolo habitual de Estados Unidos, que suele evitar pronunciarse a favor de uno u otro líder en momentos de crisis políticas en el extranjero, al asegurar en Twitter que espera que el primer ministro dimisionario de Italia, Giuseppe Conte, “siga” en el cargo que ahora ejerce en funciones.
El presidente estadounidense ya dio muestras de sintonía con Conte cuando este le visitó el año pasado en la Casa Blanca, y ahora parece haber calculado que su dosis de populismo es la adecuada para Italia, que está a la espera de un acuerdo entre el Movimiento 5 Estrellas y el Partido Democrático (PD) para definir su futuro.
Aunque no se refirió a la creciente guerra comercial con China, Trump sí retomó al regresar a Washington sus habituales críticas a la Fed, y aseguró que al banco central estadounidense “le encanta ver cómo las empresas manufactureras” del país “pasan dificultades para exportar, mientras el resto del mundo se beneficia”.