Teherán. Las sanciones impuestas por parte de EEUU contra Irán se transforman de una complicada guerra económica a una amplia contienda política y diplomática con perspectivas de un enfrentamiento militar en un futuro próximo.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el 24 de junio la imposición de sanciones al líder supremo de Irán, Ali Jameneí, y a ocho comandantes iraníes; Asimismo ha anunciado que este fin de semana será también sancionado el Ministro de Exteriores de Irán, Mohamad Yavad Zarif.
Pero los radicales conservadores iraníes no pueden soportar la condena contra Jameneí quién es líder supremo en Irán y religioso para gran parte de la comunidad musulmana chií, y con esta medida EEUU de algún modo les crea una pasión para un enfrentamiento militar.
El analista político, Mehdí Motaharnya, explicó a EFE que “al parecer los estadounidenses de modo indirecto están empujando a Irán hacia una guerra, ya que saben que para los conservadores radicales iraníes el refugio en la guerra es la ruta de salida de la situación actual”.
Marandí, dijo que “Trump no ha frenado la guerra por 150 personas, si no por que sabe que entra a un tema que no puede lograr victoria en ello”.