La Haya. Holanda cumple “muchas características de un narco-Estado”, dijo la Asociación de Policía Holandesa (NPB) en un informe enviado al Parlamento para denunciar la falta de personal y de recursos que impiden lidiar con cuatro de cada cinco casos relacionados con las drogas o la prostitución forzada.
El informe, basado en entrevistas con 400 policías de investigación, advierte de que los agentes afrontan “demasiados problemas” para hacer su trabajo, a pesar de que hace dos años se dio la voz de alarma sobre el auge de una economía ilegal.
La NPB concluye que hay una sobrecarga de trabajo que no permite a los policías investigar una fracción importante de delitos, que llega hasta cuatro de cada cinco casos de criminalidad que ocurren en diferentes puntos del país.
Según cifras oficiales, tres millones y medio de delitos quedan sin investigar por falta de medios cada año en Holanda.
Los delincuentes, advierte el informe, aprovechan esta situación para “convertirse en empresarios ricos con intereses en la industria hotelera y el mercado de la vivienda” y están convirtiendo Holanda es un “narco-Estado”, donde el tráfico de drogas prospera.