Buenos aires. Un juez federal argentino pidió ayer jueves el desafuero de la expresidenta y actual senadora Cristina Fernández para arrestarla por el presunto encubrimiento de los iraníes acusados del atentado contra un centro judío de Buenos Aires en 1994.Fernández también fue acusada de traición a la patria, uno de los delitos más severamente castigados por la ley argentina.
Esta es la primera vez que un magistrado ordena la detención de la expresidenta, que afronta otras investigaciones judiciales por el supuesto lavado de dinero que recibía a cambio de la adjudicación de obras públicas.
Fernández juró como senadora nacional la semana pasada para un periodo de seis años. Para poder ser detenida como requiere el juez federal Claudio Bonadío se necesita que el Senado le retire los fueros parlamentarios con el voto de los dos tercios de los integrantes de esa cámara, los que actualmente no están asegurados.
Si no se produce el desafuero, el juez podrá seguir investigándola y eventualmente enviarla a juicio ya que la inmunidad parlamentaria sólo la protege del arresto.
Bonadío a su vez dispuso el procesamiento del excanciller Héctor Timerman y su arresto domiciliario debido a su delicado estado de salud y los procesamientos con prisión preventiva del exsecretario Legal y Técnico de la presidencia Carlos Zannini y del dirigente social Luis D’Elía, quienes fueron detenidos en la madrugada del jueves acusados de los mismos delitos, dijo a The Associated Press el fiscal de la causa Eduardo Taiano.
Otros procesados y detenidos son Jorge Khalil, integrante de la comunidad iraní en Argentina, y el dirigente social izquierdista Fernando Esteche.