Ciudad del Vaticano. El papa Francisco pidió a los mandatarios de la comunidad internacional que no abandonen Haití, cuya población se encuentra “en condiciones al límite”, durante sus llamamientos tras el rezo del ángelus dominical desde la plaza de San Pedro.
“Pienso a la población de Haití, que vive en condiciones al límite, y pido a los responsables de las naciones que ayuden a este país, que no lo dejen solo”, afirmó.
El pontífice también pidió a los fieles que busquen noticias de Haití para que se den cuenta de la situación y recen mucho por este país. Y citó el testimonio del misionero italiano Massimo Miraglio, que ha contado “el sufrimiento y el dolor que existe en esa tierra”, antes de pedir: “No los abandonemos”. Haití se enfrenta a una grave crisis económica y humanitaria.
Miedo a la violencia
La misa dominical ha perdido adeptos en las iglesias de Puerto Príncipe, no por una merma de la devoción por Dios, sino por el miedo de los feligreses a la acción de las bandas armadas, que han puesto a los miembros de comunidades religiosas en su punto de mira para hacerlos sus rehenes.
El secuestro de 17 misioneros y sus familias a manos de la banda armada 400 Mawozo el pasado 16 de octubre es el último episodio de una larga lista de ataques contra religiosos.
En abril pasado, otros diez religiosos, entre ellos dos franceses, pasaron varias semanas secuestrados por la misma banda; en septiembre un diácono fue asesinado y su mujer secuestrada en plena misa en Puerto Príncipe y a comienzos de ese mes, un sacerdote fue asesinado en Cap-Haitien a la salida de un banco.
En la iglesia Saint Pierre de Petion-Ville las primeras filas de bancos estaban vacías durante la misa oficiada a las 9.00 de la mañana de este domingo.
El sacerdote mencionó el problema de la criminalidad en el país durante la homilía, frente una concurrencia menor a la habitual, aunque entregada y vestida de domingo, como Gary Dérilus, que trabaja en este templo y atendió a Efe después del oficio.
Muchas sillas vacías había también en el segundo servicio ofrecido en la Iglesia de Dios Casa de Refugio, en Delmas 52, durante esta jornada dominical y por los mismos motivos. Mientras el pastor daba su sermón, uno de los miembros de la congregación explicó a Efe que “debido a la inseguridad la gente que vive lejos no viene a la iglesia. Pero en el primer servicio, que terminó a las 9.15, había más gente. Pero para el segundo servicio” ha decaído mucho la asistencia.
Aglomeraciones en las gasolineras tras escasez
Cientos de conductores se agolparon ayer en las pocas gasolineras de Puerto Príncipe que han recibido carburante, con la esperanza de repostar después de semanas de desabastecimiento. En una gasolinera en la zona de Carrefour de l’Aéroport, una de las pocas de la capital a las que han llegado los camiones de suministro, la gente aguarda desde la pasada noche, formando una larguísima fila de vehículos carretera arriba.