La OTAN dijo ayer viernes que no quiere una nueva carrera armamentística tras el fin del emblemático acuerdo sobre armas nucleares de alcance intermedio (INF), que Estados Unidos y Rusia habían sellado al final de la Guerra Fría.
El tratado firmado en 1987 por el entonces presidente estadounidense Ronald Reagan y el líder soviético Mijaíl Gorbachov, limitaba el uso de misiles de alcance intermedio (de 500 a 5.500 km), tanto convencionales como nucleares.
Ambas partes señalaron durante meses su intención de retirarse del tratado, intercambiando acusaciones de romper los términos del pacto.
El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, anunció la retirada formal de Washington durante un foro regional en Bangkok, minutos después de que Rusia declarara el fin del tratado.
“Rusia es el único responsable de la desaparición del tratado”, dijo el secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, en un comunicado al término de una reunión de ministros de Relaciones Exteriores de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN).