Los rescatistas reanudaron los operativos de búsqueda entre los escombros del parcialmente colapsado edificio Champlain Towers South, en Miami-Dade (Florida, EEUU), poco después de que la noche del domingo fuera demolido lo que se mantuvo en pie.
Según confirmó este lunes la alcaldesa de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, a la cadena NBC, los equipos de búsqueda obtuvieron sobre la medianoche del domingo luz verde para retornar a sus labores, es decir poco después de que una demolición controlada derrumbara del todo el edificio residencial de 12 plantas.
“Fue absolutamente perfecto. Estamos muy, muy agradecidos de poder derribar este edificio y seguir adelante con nuestros esfuerzos de búsqueda”, declaró Levine Cava, sobre una demolición hecha pasadas las 22.30 horas locales (03.00 GMT del lunes) del domingo y a través de cargas explosivas colocadas en orificios perforados en la estructura de hormigón armado.
Los preparativos para la demolición controlada habían obligado la paralización desde la tarde del sábado las tareas de búsqueda en el Champlain Towers South, un edificio de 12 pisos que la madrugada del 24 de junio colapsó de forma súbita y por causas que aun son materia de investigación.
Durante el fin de semana, las autoridades locales habían señalado que la demolición permitiría abrir nuevas áreas para los equipos de rescate en el sitio del siniestro, del que nadie más ha sido rescatado con vida salvo los que fueron auxiliados durante las primeras horas tras el colapso.
Los rescatistas y autoridades habían acordado demoler lo que quedó en pie del edificio residencial, ubicado en primera línea frente al mar Atlántico, en vista de los riesgos que suponía la tormenta tropical Elsa, que se prevé empiece a dejar sentir sus efectos en forma de lluvia y vientos en el sur de Florida a partir del martes.
Las casi 200 personas de Champlain Towers South localizadas tras el derrumbe del 24 de junio salvaron la vida, pero han perdido casi todo lo que tenían en sus hogares.
Todos los objetos de valor hallados por los rescatistas entre los escombros están guardados y se van a entregar a sus propietarios o a sus familiares, según ha reiterado la alcaldesa Levine Cava desde que se anunció la demolición.
A día de hoy, el siniestro ha dejado el saldo provisional de 24 muertos y hay 121 personas del edificio que no han sido localizadas después del derrumbe.
Las causas del derrumbe están bajo investigación y ya ha comenzado una batalla legal en busca de compensaciones por daños por parte de algunos de los residentes en el edificio residencia, construido en 1981.
Según se ha sabido por documentos existentes en los registros de la Alcaldía de Surfside, el edificio tenía problemas estructurales que fueron detectados en 2018 por una firma de ingenieros y cuyas costosas reparaciones recomendadas no habían sido abordadas completamente.