Viena. Corea del Norte no ha comenzado aún a cumplir su compromiso de desmantelar su programa nuclear, ratificado el pasado junio en la histórica cumbre entre los presidentes estadounidense, Donald Trump, y norcoreano, Kim Jong-un, según un informe del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
“La continuación y ulterior desarrollo del programa nuclear de la RPDC (República Popular Democrática de Corea) y las declaraciones conexas de la RPDC son un motivo de honda preocupación”, sentencia en su informe anual sobre Corea del Norte el OIEA, la agencia de Naciones Unidas que vela por el uso pacífico de la energía atómica.
Esa misma descripción de la situación, palabra por palabra, aparece en el sumario del informe que ese organismo emitió hace justo un año, lo que constata que poco parece haber cambiado en el programa atómico norcoreano.
En el sumario del nuevo informe, el OIEA califica de “profundamente lamentable” la prueba atómica realizada por Pyongyang el pasado septiembre, la sexta de las efectuadas hasta ahora, justo la misma denuncia que aparecía en el informe de 2017 sobre la detonación llevada a cabo un año antes. En el documento se hace un repaso a los acontecimientos del último año, entre los que destaca trabajar hacia la “desnuclearización de la península de Corea”.