Puerto Príncipe. El secretario del Departamento de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, conversó con el secretario general de la ONU, António Guterres, sobre la posibilidad de convertir la misión de seguridad multinacional para Haití liderada por Kenia en una misión de paz de Naciones Unidas.
“(Blinken y Guterres) han discutido sobre la posibilidad de transformar la misión de seguridad en una misión de mantenimiento de la paz de Naciones Unidas para garantizar que el pueblo haitiano reciba un apoyo sostenible en materia de seguridad”, reza un comunicado del portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
El jefe de la diplomacia estadounidense también le comentó acerca de su visita al país caribeño a principios de septiembre, cuando pudo examinar los progresos realizados en el apoyo a la Policía de Haití en su lucha contra la violencia de las bandas y en el restablecimiento de la seguridad para el pueblo haitiano.
Blinken también agradeció a Guterres su liderazgo respecto a Haití a tan solo unos días del comienzo de la 79 sesión de la Semana de Alto Nivel de la Asamblea General de la ONU.
Por otro lado, el portavoz del secretario general de la ONU, Stéphane Dujarric, informó de que Guterres ha “tomado nota” del nombramiento de siete de los nueve miembros del Consejo Electoral Provisional en Haití anunciado en la víspera por parte del Gobierno de transición del país de cara a la celebración de las primeras elecciones en una década, ya que los comicios están previstos para 2026 y los últimos se celebraron en 2016.
Derechos humanos
Ayer un reporte del experto independiente William O’Neill, designado por la ONU para estudiar la situación sobre este particular en el deprimido país, indicó que la situación de los derechos humanos se agrava día a día.. “Me entristece decir que todos los indicadores siguen siendo extremadamente preocupantes. El primero, y más preocupante, es la inseguridad. (…) Tenemos que poner fin a esta agonía permanente”, declaró.
Señaló que, a pesar de un embargo internacional, siguen entrando armas y municiones de contrabando en el país, lo que permite a las bandas llevar a cabo ataques a gran escala y extender su control e influencia a nuevos territorios. Las zonas aún no afectadas por la violencia de las bandas están sufriendo su impacto directo, con una inflación galopante, escasez de productos de primera necesidad y flujos de desplazados internos que aumentan aun más la vulnerabilidad de la población, en particular de s niños y mujeres.
Las cárceles, espacios de miseria
En el sur del país, en la prisión de Les Cayes, hay 853 reclusos pese a que la capacidad total es de 200, mientras que en la prisión de Jérémie, hay 470 presos aunque el espacio fue construido para 50. “Duermen en suelos inundados de agua de lluvia y llenos de basura. A veces pasan días enteros sin comer”, afirmó el experto en su informe. Este año, asegura, han muerto varias decenas de reclusos en estas condiciones.