Moscú. La nueva arma estratégica de Rusia ha vuelto inservible cualquier sistema de defensa de misiles, aseguraron las autoridades rusas.
El viceprimer ministro Yuri Borisov dijo a la televisora estatal rusa que el misil supersónico Avangard vuela a 27 veces la velocidad del sonido, volviéndose imposible de interceptar. La nueva arma “básicamente volvería inservibles las defensas de misiles”, agregó. Borisov hizo los comentarios un día después de que el presidente ruso Vladimir Putin supervisara la prueba -supuestamente exitosa- del Avangard y la elogiara como una garantía confiable para la seguridad de Rusia en las próximas décadas.
En la prueba del miércoles, el arma fue lanzada de la base de misiles Dombarovsky, en el sur de los montes Urales. El Kremlin dijo que impactó con éxito un objetivo de pruebas en el campo de tiro Kura en Kamchatka, a unos 6,000 kilómetros (3,700 millas) de distancia.
El Ministerio de Defensa difundió un video de la prueba de lanzamiento, en el cual se observa a un misil balístico saliendo de un depósito entre una nube de humo, pero no difundió imágenes del arma.
Putin dijo que el Avangard estará en servicio con las Tropas de Misiles de Designación Estratégica de Rusia el año que entra. La prueba se realizó en medio de tensiones en las relaciones entre Rusia y Estados Unidos, que han llegado a su peor nivel desde la época de la Guerra Fría por el conflicto con Ucrania, la guerra en Siria y la interferencia rusa en las elecciones presidenciales de Estados Unidos de 2016. Sergei Ivanov, un exministro de Defensa ruso, dijo en comentarios televisados que el Avangard cambia constantemente su trayectoria y altura mientras atraviesa la atmósfera. Enfatizó que a diferencia de misiles balísticos intercontinentales -que siguen una trayectoria predecible, permitiendo calcular el lugar en donde pueden ser interceptadas-, el Avangard zigzaguea hacia su objetivo, haciendo imposible predecir la ubicación del arma.