Washington. México planteó a la OEA lo que denominó como “importantes desencuentros” con su vecino del norte desde que Donald Trump llegara a la Casa Blanca.El embajador mexicano Luis Alfonso de Alba Góngora dijo que las diferencias sobre seguridad, migración, comercio o cambio climático deben ser objeto de los países de la región.
“Ninguno de estos problemas tiene una solución nacional o unilateral. Ningún estado, por poderoso que sea, puede pretender imponer su voluntad en contra de los principios forjados por la comunidad internacional”, dijo el diplomático al dirigirse al foro hemisférico durante un Consejo Permanente de la organización.
Numerosos países del continente hicieron coro para expresar su solidaridad con México y defender los derechos de los inmigrantes en cualquier país y sin importar su estatus migratorio.