Moscú.- El presidente de venezuela, Nicolás Maduro, ha asegurado tener datos sobre los planes de Estados Unidos para interferir en las elecciones a la Asamblea Nacional venezolana, programadas para 2020.
En una entrevista transmitida este lunes por la televisión estatal rusa Rossiya 24, el mandatario venezolano aseguró tener “información” sobre los planes del “Gobierno extremista de Donald Trump” de interferir en los comicios de 2020 para “tratar de sabotearlos”.
Según Maduro, Washington busca intervenir en las elecciones venezolanas porque sabe que “no puede ganar”.
El mandatario hizo estas declaraciones en medio de las informaciones sobre su pronta visita a Rusia.
Rusia, junto con Cuba, Nicaragua, Bolivia, Turquía y China, es uno de los principales aliados del Gobierno de Maduro.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, confirmó la semana pasada los preparativos para una próxima visita a Moscú de Maduro, quien ya se entrevistó con el presidente ruso, Vladímir Putin, en la capital rusa en diciembre del año pasado.
El propio Maduro confirmó a la televisión rusa que “pronto” volverá a Moscú.
El presidente venezolano confió en poder dar un impulso a las relaciones con Rusia durante su visita al país, al tiempo que agradeció a sus autoridades por su “firme apoyo” a la soberanía de Venezuela y su “derecho a la paz”.
Asimismo, trasladó su agradecimiento a “Rusia y todo el pueblo ruso” por su “comprensión y solidaridad” con Venezuela.
En este sentido, se mostró convencido de que en los próximos “días y semanas” las partes continuarán desarrollando sus relaciones.
Por otra parte, Maduro también expresó su disposición a dialogar con EE. UU. para tratar de normalizar las relaciones.
“Claro que sí”, dijo preguntado sobre si accedería a sostener unas negociaciones directas con Trump.
Según Maduro, si Trump decidiera cambiar la política en relación a Venezuela que heredó de su antecesor Barack Obama, él también estaría dispuesto a negociar para tratar de crear “unas relaciones basadas en el respeto” mutuo.
Venezuela vive sumida en una profunda crisis después de que Juan Guaidó se proclamara presidente del país caribeño en enero pasado y fuera reconocido por más de una cincuentena de países.