Los cardenales acudirán en la tarde del sábado, tras haberse celebrado el funeral, a rezar a la tumba del papa Francisco en la basílica de Santa María la Mayor
Ciudad del Vaticano.- La capilla ardiente del papa Francisco en la basílica de San Pedro concluyó ayer, después de tres días abierta para que los fieles se despidiesen del pontífice, para proceder a la ceremonia de cierre del féretro, antes del funeral y del entierro previstos para hoy.
Según se ha podido ver en las imágenes distribuidas del interior de la basílica vaticana, pocos minutos antes de las 19:00 hora local (17:00 GMT) los fieles dejaron de desfilar ante el ataúd de Francisco y se quedaron únicamente religiosos y personal del Vaticano en el interior de San Pedro.
Los trabajadores comenzaron entonces a retirar las sillas dispuestas junto al féretro, reservadas para los colaboradores cercanos del papa argentino y diversas autoridades, así como las vallas que delimitaban la nave central, por donde durante tres días miles de personas hicieron fila para dar su último adiós.
Desde el martes por la mañana, cuando fue trasladado el cuerpo de Francisco hasta la basílica, más de 250,000 personas acudieron al Vaticano para rendirle homenaje, según informó este viernes la Santa Sede.
Concluida la capilla ardiente, se llevará a cabo la ceremonia de cierre del féretro, un rito solemne que antecede al funeral programado para este sábado a las 10:00 hora local (08:00 GMT), al que se espera la asistencia de más de 200,000 personas.
La lápida del papa Francisco será de mármol
La tumba del papa Francisco en la basílica romana de Santa María La Mayor tendrá una lápida de mármol de Liguria (norte de Italia), la tierra de sus antepasados italianos, informó este viernes el arcipreste del templo, Rolandas Makrickas.
El también cardenal, en una breve comparecencia ante los medios, reveló esta particularidad del sepulcro que desde mañana albergará el féretro del pontífice argentino.
Francisco, había dejado por escrito en su testamento su voluntad de reposar en la basílica de Santa María La Mayor, en vez de en la cripta vaticana, ya que es muy devoto de la Virgen que custodia, la ‘Salus Populi Romani’.
La tumba, entre la Capilla Paolina con ese icono mariano y la de la familia Sforza, será sencilla, en la tierra, con una lápida de mármol blanco con la inscripción ‘FRANCISCUS’, su nombre papal, y una reproducción ampliada de su cruz pectoral en plata. El mármol blanco ha sido extraído de la tierra de los antepasados de Bergoglio, en concreto de la región italiana de Liguria (norte), la de una parte de su rama materna.
En concreto, la piedra, según informa el portal oficial ‘Vatican News’, procede del pequeño municipio genovés de Cogorno, donde en 1850 nació el bisabuelo de Bergoglio, Vincenzo Girolamo Sivori.
“Él quiso que la piedra del sepulcro fuera de su tierra, de la de sus antepasados, piedra ligur”, aclaró el cardenal Makrickas.
Los cardenales
Los cardenales acudirán en la tarde del sábado, tras haberse celebrado el funeral, a rezar a la tumba del papa Francisco en la basílica de Santa María la Mayor, donde su féretro llegará después de un recorrido que atravesará el centro de Roma.
El cortejo fúnebre durará cerca de media hora y se irá deteniendo en los lugares más simbólicos o en los que se concentre el mayor número de fieles, informo la oficina de prensa del Vaticano.
El vehículo permitirá ver el féretro a los fieles que se colocarán a su paso por las calles de Roma.
La ruta seguirá parcialmente el trazado de la antigua Via Papalis, la procesión que hacían antiguamente los pontífices tras ser designados entre San Pedro del Vaticano y la basílica de San Juan de Letrán, catedral de la diócesis de Roma.
Esta ceremonia, rescoldo de los antiguos desfiles del Imperio Romano, constituía el primer acto oficial del pontífice como obispo de Roma.
Sin embargo, un cortejo fúnebre de un papa tiene muy pocos precedentes en la historia reciente de la Iglesia: el traslado de Pío IX desde el Vaticano hasta la basílica de San Lorenzo, indicada por el pontífice como lugar de su sepultura, en 1881 y el de Pío XII, en 1958, pues murió en Castel Gandolfo.
El papa Francisco ha sido recordado por haber combatido los “crímenes” cometidos por representantes del clero contra menores y personas vulnerables, según se lee en el ‘rogito’, el acta sobre su vida que será introducido en su féretro.
“Hizo más severa la legislación sobre crímenes cometidos por los representantes del clero contra menores y personas vulnerables”, se lee en la última línea de este documento, en el que se recuerda su vida y los puntos más destacados de su pontificado.
El texto, que será introducido en el féretro dentro de un tubo de metal sellado y lacrado para la posteridad, comienza con la biografía de Jorge Bergoglio, nacido en Buenos Aires en 1936, hijo de emigrantes italianos, sus estudios en química o su ingreso en la Compañía de Jesús. “Fue un pastor simple y muy amado en su archidiócesis, que viajaba en metro o en autobús. Residía en un apartamento y se preparaba la cena solo porque se sentía uno más entre la gente”, destaca.
Después el ‘rogito’ rememora su elección como papa el 13 de marzo de 2013, tras la histórica renuncia de Benedicto XVI, y subraya su decisión de adoptar el nombre pontificio del santo de Asís por su deseo de “llevar en el corazón a los pobres del mundo”.
“Siempre atento a los últimos y a los descartados de la sociedad, Francisco, nada más ser elegido, decidió vivir en la Casa Santa Marta porque no podía prescindir del contacto con la gente”, evoca.
Asimismo expone las muchas visitas que a lo largo de sus más de doce años de pontificado hizo a prisiones, centros de acogida para discapacitados o drogradictos, y sus llamamientos a los sacerdotes de ser “misericordiosos” y “salir de las sacristías”.
El acta también recoge su “muy rico” magisterio doctrinal, marcado por “un estilo sobrio, humilde, fundado en la apertura misionera, en la valentía apostólica y la misericordia” y en las advertencias contra “la mundanidad en la iglesia”.
Entre sus hitos, cita su “incansable dedicación en favor del diálogo con los musulmanes y con representantes de otras religiones”.
Pero también su ‘motu proprio’ de 2019 ‘Vos estis lux mundi’ sobre los delitos de abusos sexuales o poder del clero. “Hizo más severa la legislación sobre los crímenes cometidos por representantes del clero contra menores y personas vulnerables”.
Asimismo, destaca sus cuatro encíclicas, también la ‘Laudato Si’ (2015) en la que “toca el problema de la ecología y la responsabilidad del ser humano en la crisis climática”. Entre otras cosas, el ‘rogito’ manifiesta que “su voz se levantó por los inocentes”, especialmente durante la pandemia, así como para advertir en numerosas ocasiones a la paz” en un mundo que sufre “una Tercera Guerra Mundial por trozos”, citando los conflictos en Ucrania, Palestina, Israel, Líbano o Birmania (Myanmar). “Francisco deja a todos un testimonio admirable de humanidad, vida santa y paternidad universal”, termina.
Líderes mundiales
La despedida solemne al papa Francisco congregará este sábado en el Vaticano a una amplia presencia internacional, incluida una participación destacada de líderes de América, encabezados por los presidentes de Estados Unidos, Argentina y Brasil. Desde Washington, viaja el presidente Donald Trump junto a la primera dama, Melania Trump, en una muestra del peso simbólico del pontífice latinoamericano en el escenario global.
También asiste el mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, acompañado por su esposa, Janja, y el presidente argentino, Javier Milei, quien llega junto a su hermana Karina —secretaria general de la Presidencia— y varios ministros, entre ellos el canciller Gerardo Werthein.
En el plano regional, se suman los presidentes de Ecuador, Daniel Noboa, y República Dominicana, Luis Abinader —quien está acompañado de su esposa, Raquel Arbaje, y el presidente de la Cámara de Diputados, Alfredo Pacheco—, reforzando así una participación de alto nivel político desde América Latina.
México está presente a través de la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, en sustitución de la presidenta Claudia Sheinbaum, mientras que Colombia envía una comitiva encabezada por la primera dama, Verónica Alcocer, y la canciller Laura Sarabia.
Desde Chile acuden el canciller, Alberto van Klaveren; el presidente del Senado, Manuel José Ossandón, y el titular de la Cámara de Diputados, José Miguel Castro, y Guatemala está representado por la ministra de Cultura y Deportes, Liwy Grazioso.
Trajes y banderas latinoamericanas
Enfundadas en trajes regionales y luciendo banderas de varios países hispanohablantes, una veintena de mujeres latinoamericanas residentes en Roma coloreó los aledaños de la Plaza de San Pedro en su visita al féretro del papa Francisco, al que orgullosamente calificaron como “uno de los nuestros”.
El grupo de fieles de Perú, Colombia, Ecuador, Guatemala y Honduras se reunió para despedirse del pontífice argentino, en el último día en el que el féretro estará abierto al público y a pocas horas de que comience su funeral este sábado a las 10.00 (08.00 GMT)
“Le doy gracias a Dios por haberlo llevado a reposar. Es una gran tristeza pero dándole gracias al señor por ello. El papa era uno de nosotros”, dijo a EFE Raquel Quiroga, de Colombia, vestida con una falda colombiana.
La gran afluencia de gente, aunque sí la emocionó, no le causó sorpresa.
“Para mí representa un gran honor ver a Francisco y estar aquí. Darle gracias a Dios de tener la oportunidad que nos dio de poderlo conocer y de las buenas enseñanzas que él nos dejó”, comentó a EFE Evelyn, con una bandera de Guatemala.
“Ha sido un personaje muy importante en mi vida, en los trabajos, en todo… Siempre recuerdo cuando él decía en la pandemia: ‘yo estoy orando por ustedes, pero también ustedes oren por mí’. Ese es el recuerdo más grande que tengo de él”, explicó.
“Esta es una despedida de corazón. Pertenecemos a Latinoamérica y él era un hombre del pueblo”, destacó otra participante en la reunión.
Los preparativos de seguridad
6 kilómetros
Recorrerá el cortejo fúnebre que trasladará los restos del difunto papa desde San Pedro de Vaticano hasta la basílica de Santa María la Mayor, donde Francisco dispuso ser enterrado en una tumba sencilla.
3,000
voluntarios movilizará la Protección Civil italiana, responsable de la gestión de los preparativos. Habrá 55 equipos sanitarios repartidos a lo largo del cortejo fúnebre entre San Pedro del Vaticano y la basílica de Santa María la Mayor, además de 11 puestos médicos avanzados y 52 ambulancias adicionales que se unirán a la flota ya existente.
17
Grados y un sol radiante se esperan a las 10:00 (08.00 GMT) del sábado, hora de comienzo del funeral, aunque el termómetro podría alcanzar los 24 grados a lo largo de la jornada.
260,000
Asientos pone el grupo estatal Ferrovie dello Stato a disposición de quienes deseen acercarse a Roma en tren. Protección Civil confirmó también que se han reservado para el mismo día 500 plazas de estacionamientos para autobuses y autocares en Roma y sus alrededores.
130
Delegaciones internacionales han confirmado ya su presencia en el acontecimiento, pero se espera que la cifra definitiva pueda subir hasta las 170. Medio centenar estarán encabezadas por jefes de Estado o de Gobierno, entre ellos una decena de soberanos.
120,000
Llegadas previstas a Roma el 25 y 26 de abril, que se traducirán en 320,000 pernoctaciones, según cifras del Departamento de Turismo de la capital italiana, que avisa de que las estimaciones pueden quedar por debajo incluso de las que se produzcan finalmente. 101,000 de esas llegadas se darán en hoteles y otras 53.000 en “establecimientos complementarios”.
11,000
militares y miembros de las fuerzas de seguridad, sin contar los equipos propios de las delegaciones internacionales, que velarán por que el funeral se celebre sin incidentes. Policías, carabineros y agentes de tráfico se sumarán a al menos 1,500 soldados.