Bagdad. El ministro de Exteriores de Irán, Abás Araqchí, insistió en Bagdad que su país quiere la paz y que trabajará para alcanzarla en la Franja de Gaza y el Líbano, pero advirtió también que está preparado para la guerra en caso de verse arrastrado a un conflicto regional.
“La República Islámica de Irán no quiere aumentar la tensión, el conflicto y la guerra, aunque está preparada para cualquier situación. Estamos preparados para la guerra, pero también estamos preparados para la paz, ésta es la firme postura de la República Islámica de Irán”, afirmó el jefe de la diplomacia iraní en una rueda de prensa conjunta con su homólogo iraquí, Fuad Husein.
Araqchí afirmó que en Irán están totalmente preparados para una situación de guerra, si bien reiteró que su mayor interés es poner fin al conflicto en los territorios palestinos y en el Líbano.
“No le tememos a la guerra, pero no queremos la guerra, queremos la paz y trabajaremos por una paz justa en Gaza y el Líbano”, insistió.
No obstante, a su llegada a la capital iraquí, el ministro de Exteriores iraní advirtió que Teherán no tiene “líneas rojas” a la hora de defender a su gente y sus intereses, en un momento de máxima tensión en Oriente Medio y ante los esfuerzos de la República Islámica para contener una guerra regional.
Según medios estadounidenses, Israel ha determinado los objetivos de su posible represalia por el ataque con misiles iraníes del pasado 1 de octubre y su objetivo sería atacar infraestructuras militares y energéticas. Irán realizó ese ataque en respuesta a la invasión israelí del Líbano y al asesinato de sus aliados, entre ellos el líder del buró político de Hamás, Ismail Haniyeh, en Teherán, y el secretario general del grupo chií libanés Hizbulá, Hasán Nasrala, en Beirut.