Puerto Príncipe. Haití se ve cada vez más hundido en una crisis de inseguridad, sin que se vislumbre la posibilidad de lograr la estabilidad necesaria para organizar elecciones, cuando ayer se cumplieron seis meses del asesinato del presidente Jovenel Moise.
Las últimas víctimas de la ola de violencia fueron dos periodistas, Wilguens Louissaint y John Wesley Amady, quienes murieron tiroteados este jueves por los miembros de una pandilla en la zona de Boule 12, a las afueras de Puerto Príncipe, según informó Radio Écoute, emisora canadiense para la que trabajaba uno de ellos.
Este doble asesinato, última muestra del recrudecimiento de la violencia en el país, se produjo una semana después de un ataque armado que fue repelido por el equipo de seguridad del primer ministro, Ariel Henry, durante las celebraciones del Día de la Independencia, el pasado primero de enero, en la ciudad de Gonaives.
La violencia de las bandas ha dejado al menos 893 muertes violentas en 2021, entre ellas 53 de policías, según datos de la Comisión Episcopal Nacional de Justicia y Paz de la Iglesia Católica en Haití.
Las bandas, que se financian con secuestros, raptaron el año pasado al menos a 1.002 personas, entre ellas 81 extranjeros de 6 países, según un informe del Centro de Análisis e Investigación en Derechos Humanos (CARDH), una ONG especializada en el seguimiento de estos casos. Desde junio de 2021, la zona de Martissant, en la entrada sur de Puerto Príncipe, se ha transformado en un corredor de la muerte, con grupos armados que se enfrentan entre sí y con la Policía. Los enfrentamientos han hecho que la zona sea inhabitable e intransitable, lo que supone frecuentes cortes de suministro de mercancías hacia o desde el suroeste.
Elecciones en el aire
Ante la incapacidad de la Policía para hacer frente a la violencia, el pánico se ha instalado en la población y nadie habla de elecciones en el país. Henry no ha logrado siquiera nombrar un consejo electoral, cuya elección fue uno de sus principales compromisos cuando asumió el poder el pasado julio.
Sin autoridad electoral ni una ley para organizar los comicios, está en el aire el plan de organizar un referéndum para votar una nueva Constitución a comienzos de 2022. Haití sólo cuenta con diez cargos electos, que son diez senadores cuyo mandato caduca en enero de 2023, aunque algunos sectores políticos también ponen ese hecho en tela de juicio, puesto que, según una interpretación de la Constitución, el mandato de esos legisladores terminaría la semana que viene.
Las investigaciones del magnicidio, estancadas
En medio a la grave crisis que atraviesa Haití, las investigaciones del magnicidio continúan estancadas en el país, con nulos avances en los últimos meses. La semana pasada, Jamaica rechazó deportar a Haití a uno de los mercenarios colombianos acusados de haber perpetrado el crimen, el exmilitar Mario Antonio Palacios, porque el país no envió pruebas suficientes de su implicación en el caso, y prefirió deportarlo a Estados Unidos.