Una estudiante de Corea del Sur, identificada como Jung Yoo-jung, recibió una sentencia a cadena perpetúa, luego de que confesó que mató a su profesora por “curiosidad”.
De acuerdo con las autoridades, la joven de 23 años tiene una obsesión con novelas criminales y programas de asesinos seriales que se transmiten en servicios de streaming, precisa el South China Morning Post.
Según las investigaciones de la policía, en mayo del presente año la estudiante contrató a una profesora de inglés a través de una aplicación en línea. Posteriormente, la citó en su casa para supuestamente tener lecciones de idioma.
Sin embargo, cuando la educadora llegó a la vivienda, la joven la atacó con un cuchillo y la asesinó a puñaladas.
¿Qué se sabe del caso de la estudiante?
Los investigadores revelaron que la joven estudiante vivía únicamente con su abuelo. Llevaba meses planeando el homicidio y “buscaba víctimas” durante meses a través de una aplicación para tener clases con profesores privados, apunta New York Post.
En su historial en la aplicación, las autoridades encontraron que Jung Yoo-jung le escribió a más de 50 personas, la mayoría mujeres. La homicida fingía ser una madre de familia y les pedía lecciones en casa para sus hijos.
Finalmente, una docente de inglés, de 26 años, aceptó reunirse con Jung Yoo-jung, creyendo que le daría clases a sus hijos menores de edad. No obstante, al llegar a la casa, la agresora la apuñaló en más de 100 ocasiones, e incluso la siguió apuñalando cuando ya había muerto. La joven fue arrestada luego de que un taxista la vio arrojando bolsas empapadas de sangre en un bosque de la zona.
¿Qué pasó en el juicio?
Durante su juicio, Jung admitió el crimen para conseguir una sentencia más breve. De igual manera, sus abogados trataron de apelar en la corte aseverando que la estudiante tenía problemas mentales, los cuales no lograron probarse.
En entrevistas con terapeutas, quienes -luego de varias pruebas- determinaron que la agresora tenía altos niveles de psicopatía, por lo que la corte no vaciló su sentencia.
Finalmente, la joven trató de justificar sus acciones alegando que su interés por cometer un asesinato se originó luego de que vio varios shows dedicados a los asesinos seriales más famosos del mundo.
Sin embargo, ninguno de sus argumentos resultaron válidos durante el juicio, recibiendo sentencia a cadena perpetúa. La Fiscalía pedía la pena de muerte para la estudiante, ya que en Corea del Sur esta medida es legal, aunque no se ha realizado ninguna ejecución desde 1997.
